Madrid, 21 jun (RHC) El candidato a la presidencia del Gobierno español por la agrupación Unidos Podemos, Pablo Iglesias, defendió la celebración de un referendo de autodeterminación en Cataluña, y acusó a la derecha de exacerbar ese conflicto territorial.
En declaraciones a la prensa en Madrid advirtió Iglesias que no renunciará a priori a esa consulta por considerarla la mejor solución, aunque mostró su interés en hablar con todos los partidos sobre el tema.
Al respecto, aludió al Partido Socialista Obrero Español cuyo líder, Pedro Sánchez, afirmó la víspera que no apoyará un eventual ejecutivo de Unidos Podemos tras las elecciones generales del domingo próximo.
También consideró el candidato de Unidos Podemos, coalición entre Izquierda Unida y Podemos que marcha segunda en todas las encuestas, que el planteamiento de los socialistas sobre un modelo de gobierno federal no es una propuesta, sino un anacronismo.
Recientemente se publicó que una eventual alianza entre las agrupaciones progresistas españolas superaría a un posible pacto de los partidos Popular (PP) y Ciudadanos (C's) tras las elecciones generales del 26 de junio.
A unos días de la crucial contienda -una repetición de facto de los comicios realizados el pasado 20 de diciembre-, los sondeos publicados por los diarios El País, El Mundo y ABC sitúan la suma de votos entre Unidos Podemos y el PSOE cerca de la mayoría absoluta.
Elaborado para el primero de esos periódicos de ámbito estatal, el estudio de la firma Metroscopia atribuye una estimación de 93 escaños a Unidos Podemos (coalición sellada entre Podemos e Izquierda Unida) y de 82 bancas al Partido Socialista Obrero Español (PSOE).
De llegar a un arreglo tras el día 26, ambos reunirían 175 puestos en el Congreso de los Diputados y estarían a un escaño de la mayoría absoluta, fijada en 176 de los 350 miembros de la Cámara baja.
Aunque para muchos analistas una alianza de ese tipo tendría altas probabilidades, en los últimos meses se pusieron de manifiesto grandes desavenencias entre la coalición de izquierda y el PSOE, sobre todo en lo referido a la pretensión secesionista de Cataluña, rechazada por los socialistas.
Las tres encuestas colocan al conservador PP, del presidente del Gobierno en funciones Mariano Rajoy, como la fuerza más votada en las generales del venidero domingo, al concederle entre un 29 y un 30,5 por ciento del voto y 113-129 asientos en el Congreso.
El sondeo de El Mundo augura que mejorará sus resultados hasta los 129 escaños, frente a los 123 obtenidos hace seis meses, mientras que el de El País le otorga nueve menos que en aquella ocasión.
Para ABC, los populares lograrían 121-124 diputados, seguido de Unidos Podemos (84-85), el PSOE (80-83) y el centroderechista C's, que volvería a ocupar la cuarta posición de diciembre, con 38-40 representantes en la Cámara baja.
Para obtener la confianza del Congreso, es preciso conseguir 176 escaños en una primera votación o mayoría simple en la segunda.
A juicio de observadores, si los sondeos confirman el descalabro de los socialistas, la organización centenaria se verá obligada a elegir entre apoyar a Unidos Podemos o abstenerse y permitir un gobierno de Rajoy para evitar unas terceras elecciones.
Si el día 26 las urnas refrendan estos vaticinios de las pesquisas, el escenario obligará a los partidos a negociar para intentar pactar la conformación de un ejecutivo.
El PP favorece una gran coalición con el PSOE, pero los socialdemócratas aseguraron que no permitirán, ni por activa ni por pasiva, la continuidad de los conservadores en el Palacio de la Moncloa (sede del poder central).
Unidos Podemos aboga por una alianza con los socialistas para formar un gobierno de progreso, aunque estos últimos eludieron hasta el momento pronunciarse sobre esa eventual asociación.