Madrid, 11 jul (RHC) El vicesecretario de Organización del gobernante Partido Popular de España, Fernando Martínez-Maillo, propuso al opositor PSOE, Partido Socialista Obrero Español a rectificar su rechazo a la investidura del presidente del gobierno en funciones, Mariano Rajoy, o llevará al país a terceras elecciones.

En Madrid declaró el dirigente partidista ante el Comité de Dirección del PP, en un contexto en que Rajoy se reunirá este miércoles con los líderes del PSOE, Ciudadanos y Podemos para intentar lograr un acuerdo y formar un nuevo Ejecutivo.

También expresó Martínez-Maillo que el jefe de gobierno insistirá al el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, desbloquear la conformación de un gobierno español facilitar

El representante del Partido Popular solicitó al dirigente opositor de Ciudadanos, Albert Rivera, que asista a la reunión con Rajoy y conserve su posición de establecer un acuerdo que facilite la investidura política.

Por su parte, en declaraciones a la radioemisora Cope, el secretario de Organización del PSOE, César Luena, calificó como una posición rotunda y clara el voto contrario a la reelección del actual presidente del Ejecutivo en funciones.

Con sus afirmaciones Luena ratificó la decisión del Comité Federal, máximo órgano de dirección de la centenaria organización, de no avalar, con sus 85 diputados, la continuidad de los conservadores en el gubernamental Palacio de la Moncloa.

De acuerdo con el sistema parlamentario español, después de las elecciones del pasado 26 de junio corresponde a la Cámara baja elegir al presidente del Gobierno, que para ser investido necesita mayoría absoluta en una primera vuelta, es decir 176 votos.

En caso de no conseguirlos, 48 horas después se procede a una segunda votación y entonces el requisito es lograr mayoría simple.

Actualmente, los posibles aliados del Partido Popular son la formación de centroderecha Ciudadanos, el Partido Nacionalista Vasco y Coalición Canaria, con un representante en el legislativo. Si los conservadores logran todo ese respaldo Rajoy quedaría a un escaño de la mayoría absoluta, y le bastaría una abstención para ser investido.