La Habana, 5 abr (RHC) La Organización de Estados Americanos (OEA), la misma que en 1962 expulsó a Cuba, y acumula innumerables traiciones a los pueblos para satisfacer los designios imperiales, asumió una vez más posiciones antidemocráticas, violatorias de sus propios principios. La actuación servil, inescrupulosa y de total apego a los mezquinos intereses del imperio, de su secretario general, Luis Almagro, en interés de aplicar la Carta Democrática a la hermana República Bolivariana de Venezuela, constituye una muestra fehaciente, expresa un comunicado de la Federación de Mujeres Cubanas, FMC.
Es inaceptable que en el siglo XXI, en nombre de la democracia, se viole el derecho a la soberanía y a la autodeterminación de los pueblos. Es vergonzoso que se promueva la injerencia en los asuntos internos de los países, y que lejos de pronunciarse contra las constantes violaciones de los derechos humanos en el continente, contra la criminalización de la protesta de los movimientos sociales, los feminicidios, que cada día cobran la vida de cientos de mujeres, de consolidar la unidad de Nuestra América y trabajar mancomunadamente para hacer realidad la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, adoptada por la Celac en enero del 2014, se emprendan acciones desestabilizadoras, contra la Revolución Bolivariana y su presidente Nicolás Maduro, denuncia el documento.
Venezuela no está sola, la acompañamos en su lucha, valoramos la grandeza de su revolución y el legado humanista y solidario del comandante Hugo Chávez. Nos levantamos en defensa de su proyecto social emancipador, fieles seguidoras de quienes escribieron y escriben la verdadera historia de América Latina y el Caribe.
Las mujeres cubanas, testigos de similar asedio contra nuestra Revolución, nos sumamos al lado de los valientes, de los patriotas, de los que no mendigan hinojos por cuotas de poder y dinero. Desde la tierra de Mariana, Martí, Celia, Vilma, Fidel y Raúl, declaramos nuestro irrestricto respaldo y solidaridad al gobierno venezolano, al pueblo, a sus heroicas mujeres, beneficiarias y protagonistas de una profunda revolución social, y a su presidente Nicolás Maduro Moros, expresa finalmente la FMC.
