La Habana, 19 sep (RHC) Tres aeronaves procedentes de Japón, Bolivia y Colombia llegan este martes a Cuba con ayuda humanitaria para los damnificados del huracán Irma, un potente meteoro que azotó recientemente la isla caribeña.

Desde que las imágenes mostraron al mundo los estragos ocasionados por Irma, la comunidad internacional expresó su solidaridad con la mayor de las Antillas, la cual sufrió cuantiosas pérdidas materiales en diversos sectores.

En medio de la etapa de recuperación -la cual mantiene un ritmo ascendente ya sea en materia de higienización como en la reactivación de servicios vitales a la población-llegaron al país caribeño donaciones desde diferentes latitudes, precisa Prensa Latina.

Como parte de los gestos altruistas, en las últimas horas llegó una carga de ocho toneladas de ayuda humanitaria procedente de Suriname.

El cargamento, trasportado por la nave PZ-TCQ de Surinam Airways, estaba conformado por arroz, agua, leche, sábanas y productos de aseo.

Según el secretario permanente del Ministerio de Asuntos Exteriores de Suriname, Michiel Raafenberg, el principal objetivo de este envío es mostrar a Cuba el apoyo solidario de ese país suramericano en nombre de la amistad que une a ambas naciones.

También llegó a Cuba un buque de la Armada de República Dominicana con un cargamento de ayuda para asistir a los cubanos.

De acuerdo con el comandante de la embarcación, capitán de fragata MacDonal Belliard, se trata de alrededor de 90 toneladas de colchones y materiales de construcción: madera, planchas de zinc, puertas de metal, entre otros.

La carga fue preparada por indicaciones directas del presidente dominicano, Danilo Medina, quien al conocer los daños ocasionados por el huracán se comunicó con diplomáticos cubanos y les manifestó su apoyo.

Venezuela se convirtió el 12 de septiembre en el primer país en enviar ayuda humanitaria a Cuba, la nave 2803 modelo Y-8 de la Fuerza Aérea Venezolana arribó al aeropuerto internacional José Martí con un mensaje de solidaridad a nombre de ese pueblo y su presidente constitucional, Nicolás Maduro, además de una carga de 7,3 toneladas destinadas a los damnificados cubanos.

Un lote de colchones, agua y alimentos enlatados conformó el primer envío a la mayor de las Antillas.

El huracán -que ocasionó la pérdida de 10 vidas humanas y cuantiosos daños materiales en poco más de 72 horas- estuvo acompañado de grandes bandas de alimentación y vientos huracanados que llegaron alcanzar rachas de hasta 252 kilómetros por hora.