La Habana, 13 mar (RHC) El vicepresidente de la comisión de Relaciones Internacionales del Parlamento cubano, Rolando González, afirmó que la comunidad internacional debe estar alerta ante la agresión que se orquesta en el mundo contra Venezuela.

González recalcó que ese país sudamericano tiene un proyecto que defiende y busca un ideal socialista, sin embargo, no tiene una economía socialista, ni una estructura de gobierno clásicamente socialista.

El diputado subrayó que Venezuela simplemente cuenta con un sistema político que ha empezado a transformarse, dándole más posibilidades al pueblo de participar en los órganos de poder, y también ha comenzado a redistribuir sus riquezas en función de las mayorías y de las necesidades de los países de la región.

Recordó el parlamentario que antes ese patrimonio iba a parar a la burguesía venezolana a través de la corrupción política, y a los intereses de las grandes empresas petroleras, y el cambio de esa realidad hace que la nación sudamericana constituya una amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos.

Asimismo, manifestó que Venezuela vive un escenario complejo, pero corresponde a sus ciudadanos resolverlo y no a la Organización de Estados Americanos ni a Washington.
Venezuela entregó una nueva nota de protesta al encargado de negocios de Estados Unidos en el país, Todd Robinson, como rechazo a sus reiteradas declaraciones injerencistas contra la soberanía y la paz del pueblo y el gobierno venezolanos.

La carta la entregó el viceministro para América Latina de Relaciones Exteriores, Alexander Yánez, durante un encuentro en la capitalina Casa Amarilla, de acuerdo con una nota oficial.

Durante la reunión, Yánez exhortó al funcionario estadounidense a respetar las relaciones diplomáticas entre los países, como reflejan las normas del derecho internacional y la Convención de Viena.

De igual modo, instó al gobierno del presidente Donald Trump a respetar la democracia y la soberanía de Venezuela y reiteró que ningún país tiene derecho de intervenir en los asuntos políticos, económicos y sociales de la nación sudamericana.

A fines de febrero, la cancillería venezolana entregó una misiva a Robinson por acciones que las autoridades del país sudamericano consideraron intervencionistas. Desde su llegada a Caracas, el encargado de negocios reitera en las redes sociales y medios públicos sus pretensiones de 'buscar las oportunidades para 'ayudar con el regreso de la prosperidad y la democracia en Venezuela'.

Además, descalifica de manera constante a la institucionalidad venezolana, principalmente a la Asamblea Nacional Constituyente, lo que el Estado interpreta como una abierta intromisión en los asuntos internos de su país.