Pyongyang 6 nov (RHC) La República Popular Democrática de Corea (RPDC) despidió al presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, con un impresionante espectáculo de gimnasia popular masiva, el festejo Arirang.
El espectáculo cautivó también al anfitrión del gobernante de la Isla, el líder Kim Jong Un, e iluminó una de las últimas noches del presente otoño pyongyanés.
La mítica y singular magia regalada a Díaz-Canel suma deportes, acrobacia, música, teatro, drones luminosos, pirotecnia, luces, una pizarra humana, todo con gran precisión.
Cerca de una hora y 40 minutos duró la fiesta, que contó con una banda sonora que mezcló la música tradicional local y europea y melodías cubanas como la Guajira guantanamera, añade la fuente.
La Cancillería cubana informó en la red social Twitter que el mandatario de la nación caribeña también sostuvo un encuentro con Kim Jong Nam, Presidente del Presídium de la Asamblea Popular Suprema, quien ratificó la posición invariable del partido y el pueblo de la RPDC de fomentar la amistad y solidaridad con Cuba.
Las nuevas generaciones de cubanos vamos a ser leales y fieles a nuestras relaciones históricas de hermandad, expresó Díaz-Canel durante el encuentro.
El Presidente cubano visitó, además, la Universidad Kim Il Sung, primer centro de altos estudios construido en ese país en 1946, poco después de su independencia. Díaz-Canel estuvo acompañado de Pak Dong Ju, primer ministro de la RPDC, y Kim Sung Tu, presidente del Comité de Educación y del Comité de Solidaridad con Cuba.
