La Habana, 25 oct (RHC) El congresista estadounidense James McGovern calificó este viernes de estúpido truco político la decisión del gobierno de Donald Trump de suspender los vuelos a todos los destinos de Cuba, con la única excepción de La Habana.

'Cerrar estos vuelos es un estúpido truco político. Es absurdo que esta administración les quite la libertad a los viajeros estadounidenses de volar a donde quieran', expresó en un comunicado el legislador demócrata, quien es presidente del Comité de Reglas de la Cámara de Representantes.

Nuestros desacuerdos con el gobierno cubano deben manejarse a través de la diplomacia y el diálogo, no de restricciones obsoletas e impopulares de la Guerra Fría, añadió el legislador, uno de los miembros del Congreso norteamericano que más aboga por el acercamiento bilateral.

Estas medidas, apuntó, 'nos aíslan de nuestros aliados, envalentonan a los intransigentes, hieren al pueblo de Cuba y socavan a las compañías estadounidenses que han hecho importantes inversiones a largo plazo para apoyar estos vuelos'.

De acuerdo con el congresista por Massachusetts, la administración Trump debería dedicar menos tiempo a revertir el legado del expresidente Barack Obama (2009-2017), bajo cuyo segundo mandato ambos países iniciaron un proceso de normalización de relaciones que el actual mandatario decidió revertir.

En lugar de eso, estimó McGovern, el ejecutivo del republicano debería dedicar más tiempo a leer 'sobre por qué la prohibición de viajar y otras restricciones de viaje han sido un fracaso colosal que deberían terminarse lo más rápido posible'.

La reacción del representante ocurrió después de que este viernes los departamentos de Estado y Transporte dieron a conocer que a partir del 10 de diciembre las aerolíneas estadounidenses solo podrán realizar viajes al Aeropuerto Internacional José Martí de La Habana.

De ese modo, las líneas aéreas tendrán prohibido ir a cualquiera de los otros nueve aeropuertos internacionales de la mayor de las Antillas, lo cual se une a otras medidas adoptadas por la administración Trump para disminuir las visitas de los norteamericanos a la nación vecina.

El anuncio de hoy ocurrió un día después de que otro miembro del Capitolio, el senador demócrata Patrick Leahy, emitió un extenso comunicado en el cual manifestó que la Casa Blanca y algunas figuras del Congreso se preocupan poco por el impacto de las políticas punitivas de Trump en el pueblo cubano.

Según el legislador por Vermont, cada pocas semanas o meses el ejecutivo del republicano 'diseña una nueva forma de aumentar la presión sobre el gobierno cubano y, al hacerlo, causa mayores dificultades al pueblo cubano en cuyo nombre la Casa Blanca profesa actuar'. (Fuente: Prensa Latina).