El ministro cubano de Economía y Planificación, Alejandro Gil, /Foto/archivo

La Habana, 12 jul (PL).- El ministro cubano de Economía y Planificación, Alejandro Gil, ratificó hoy el compromiso gubernamental de garantizar el abastecimiento de medicinas, alimentos y combustibles pese al recrudecimiento del bloqueo de Estados Unidos y la Covid-19.

En comparecencia radio -televisiva, el  también viceprimer ministro explicó que entre el año 2020 y el primer semestre de este 2021, debido a ese contexto adverso disminuyeron los ingresos del país y aumentaron los gastos adicionales.

El pasado año, solo en reactivos, equipos médicos, medios de protección, material gastable y medicamentos, la nación invirtió 102 millones de dólares, y, en lo que va de 2021, 82 millones, precisó.

Detalló que el presupuesto de la isla destinó millones de dólares para la atención a la población en centros de aislamiento, hospitales, gastos de alimentación, vestuario, aseo, electricidad, además de las garantías salariales a los trabajadores obligados a interrumpir sus labores debido a la pandemia.

El titular enfatizó en que en 2020 el país ingresó dos mil 413 millones de dólares menos que en 2019 por las limitaciones a la exportación, remesas y a otras fuentes de ingresos, a causa fundamentalmente de las medidas coercitivas de Washington contra la mayor de las Antillas.

De igual forma, alertó que en lo que va de 2021 el país dejó de percibir 481 millones de dólares en relación con el primer semestre de 2020.

El bloqueo de Estados Unidos, vigente por casi seis décadas y recrudecido en medio de la Covid-19, impide al país acceder a divisas para respaldar los gastos que tienen que ver con la salud y alimentación del pueblo, remarcó Gil.

A ello se suman los efectos de la pandemia en la disminución del turismo y otras afectaciones, como la persecución a las transacciones financieras del territorio, situación en la cual es difícil mantener los niveles de oferta, refirió.

Lo anterior significa entonces, puntualizó el ministro, que el país pudo respaldar el enfrentamiento a la pandemia con los escasos productos captados por mecanismos como las tiendas en moneda libremente convertible.

En este sentido mencionó por ejemplo cómo Cuba no escatimó en gastos y dirigió los fondos necesarios para asumir la importación de alimentos básicos y garantizar la distribución de la aquí llamada canasta familiar normada y la venta en moneda nacional de más de 100 mil toneladas de pollo en 2021.

Además, el país hizo posible la generación de electricidad, a pesar de los gastos excesivos por el empleo de diésel importado.

Cuba decide sobre cada centavo dónde colocar los recursos y siempre piensa en el bienestar de la población y en la atención de los grupos más vulnerables, enfatizó el viceprimer ministro.