Roma, 13 ago (RHC) El secretario nacional del Partido Comunista Italiano (PCI), Mauro Alboresi, acusó al gobierno de Estados Unidos y sus aliados en la actual campaña contra Cuba, la cual calificó de cínica y sin escrúpulos.
Estamos ante una agresión que viene de lejos, acelerada ahora con el objetivo de denigrar la imagen de Cuba ante la opinión pública internacional y crear las condiciones para recrudecer las acciones dirigidas a su desestabilización, dijo el dirigente político en diálogo con Prensa Latina.
Al señalar cómo Washington y sus aliados colocan sus intereses por encima de los del pueblo cubano, destacó el impacto negativo del bloqueo estadounidense y la pandemia de Covid-19 sobre las condiciones materiales de vida en la isla.
Pero la responsabilidad no recae en el gobierno cubano y sus políticas, sino en esta campaña de agresión a través del cual se intenta impedir a Cuba proseguir su propio camino y lograr sus objetivos, apuntó.
La lógica, indicó, es siempre la misma, quien no se alinee con los grandes poderes, en este caso el imperio de los Estados Unidos de América, debe ser cuestionado y recordó que 'esto no sólo sucede con Cuba, sino también con otros países de Centro y Suramérica, lo cual no es casual'.
Alboresi precisó que 'por esta razón estamos convencidos de la necesidad de hacer comprender lo que está en la base de esta campaña' y en ese sentido resaltó el papel desempeñado por su organización, la cual promueve la unidad de los comunistas y las fuerzas de izquierda y democráticas en general para 'desenmascarar el engaño'.
Expresó que, como partido, realizan una campaña de contrainformación y participan en la recogida de fondos y materiales que Cuba necesita, 'hoy más que nunca', para enfrentar el impacto del bloqueo y la pandemia.
El actual PCI reivindica el nexo de continuidad histórica con la agrupación homónima nacida en 1921 y disuelta en 1991 al calor de la desaparición de la Unión Soviética y el ascenso de la idea de la dominación capitalista basada en el neoliberalismo, el pensamiento único y el pretendido fin de la historia.
Alboresi ingresó en 1974 al partido fundado por Antonio Gramsci y militó en él hasta 1991 cuando dio la batalla contra su disolución como hicieron otros afiliados, pues, acotó, 'considerábamos necesaria la existencia de un sujeto comunista en este país'.
A continuación, trabajó durante 25 años en el ámbito sindical en el cual fue secretario provincial, regional y nacional del frente socio-sanitario, asistencial y educativo de la Confederación General Italiana del Trabajo (Cgil), la mayor y más antigua central obrera de esta nación.
En un cierto punto, explicó en la entrevista con Prensa Latina, ingresé en el Partido de los Comunistas Italianos y junto con otros compañeros participé en el proceso de reconstrucción del PCI, lo cual se concretó en el congreso de 2016.
Aquel fue un partido que representó verdaderamente la mejor parte de nuestro país, subrayó el dirigente comunista quien afirmó que 'queremos actualizar aquellos principios y valores, estamos convencidos de la necesidad hoy más que nunca de una fuerza comunista en este país'.
En opinión de Alboresi, esa actualización debe conducir a la consolidación de una organización capaz de mantener una crítica activa al sistema capitalista y, al mismo tiempo, indicar la construcción de una sociedad socialista moderna por la vía democrática.
Esa es también, puntualizó, una de las razones que nos llevan a apoyar a Cuba, comprometida, con el apoyo del pueblo como lo demuestra la historia, con la consolidación de una sociedad socialista moderna.
Ese es uno de los motivos por los cuales Cuba es agredida. El imperio no acepta que existan sujetos que tengan una visión diferente del mundo y reivindiquen su libertad, independencia y autodeterminación, subrayó.
(PL)