Washington, 25 sep (RHC) El ministro cubano de Salud Pública, José Ángel Portal, ratificó este lunes la voluntad del país de poner sus modestas experiencias y recursos humanos a disposición de la Organización Panamericana de la Salud -OPS.
Así lo manifestó Portal al intervenir este lunes en la 60 sesión del Consejo Directivo de la OPS y la 75 del Comité Regional de la Organización Mundial de la Salud para las Américas, que se desarrolla en la capital de Estados Unidos.
Resaltó que “nuestro Sistema Nacional de Salud sigue un camino de solidaridad y cooperación que ha hecho posible durante los últimos 60 años que más de 605 mil colaboradores cubanos hayan brindado atención médica en 165 naciones”.
En la actualidad, cerca de 23 mil cooperantes de la mayor de las Antillas laboran en 56 países, dijo.
“Fortalecer, perfeccionar, aunar voluntades, innovar, cooperar… son palabras claves que deben definir el hacer de nuestros sistemas sanitarios si queremos que verdaderamente estén preparados para dar respuestas a los tantos y tan complejos desafíos que tiene por delante la humanidad”, manifestó.
En su intervención afirmó que la Salud Pública en Cuba no es privilegio de unos pocos, es un derecho de todas las personas y es responsabilidad del Estado garantizar el acceso, la gratuidad y la calidad de los servicios.
En esas bases, que sustentan el quehacer del Sistema Nacional de Salud, Cuba encuentra las mayores fortalezas para enfrentar con éxito el complejo escenario que trajo consigo la COVID-19, explicó el ministro.
Entre muchos otros elementos, ello fue posible, además, debido a nuestra gestión sanitaria, el trabajo intersectorial y el desarrollo pretérito de la ciencia que nos permitió crear vacunas propias y llevar a cabo una campaña nacional de vacunación sin precedentes, puntualizó.
Portal manifestó que los años de la pandemia fueron difíciles, en los que además Cuba enfrentó un recrudecimiento nunca antes visto del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el Gobierno de Estados Unidos, y a las consecuencias que trajo consigo la arbitraria inclusión de la isla antillana en la unilateral lista de estados supuestamente patrocinadores del terrorismo.
Por otra parte, lamentó que, a pesar de que el mundo ha mantenido a raya la pandemia de la COVID-19, no ha logrado hacerlo así con los efectos devastadores dejados por el virus.
En ese contexto mencionó que son mayores las asimetrías e inequidades en la atención médica y el principio de “salud para todos” se vuelve cada vez más lejano para diversas naciones del planeta, acotó. (Fuente: Prensa Latina).