Foto: Endrys Correa Vaillant
La Habana, 7 de feb (RHC) La remodelación y ampliación de capacidades de las instalaciones aeroportuarias cubanas, a pesar de la compleja situación económica por la que transita el país, ha favorecido el incremento de la calidad de los servicios a los pasajeros.
En el balance anual de la Corporación de la Aviación Cubana S.A. (Cacsa), presidido por el vice primer ministro Jorge Luis Tapia Fonseca y por el titular del Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila, destacaron las acciones acometidas en la Terminal 3 del aeropuerto internacional José Martí, de La Habana.
En esa instalación se puso en funcionamiento una nueva estera en el área de salida, aumentando la gestión del equipaje, lo que duplicó los mostradores de atención a los pasajeros de 24 hasta 48 (nuevo carrusel de salida).
Además, se construyó una nueva edificación para la protección, control y entrega de equipajes extraviados (Lost and Found), se aumentaron las capacidades de clima en la Terminal 3, en 22 toneladas de refrigeración, y se instalaron cuatro nuevos elevadores: dos panorámicos y dos para minusválidos.
En el área de llegada –se precisó en la reunión– se modificó el flujo de pasajeros, permitiendo aumentar en un 70 % los que utilizan el canal verde (sin control físico del equipaje), y para lo cual se hicieron las reparaciones capitales de los cuatro carruseles de llegada, instalándose tres equipos de Rayos x de última generación.
Directivos de Cacsa resaltaron que se adquirieron un total de 32 equipos de Rayos x, así como equipos de clima para poner en marcha en 2024.
También en el aeropuerto José Martí, pero en la Terminal 2, se efectuaron modificaciones a los flujos y reformas, que contribuyeron a la ampliación de capacidades en el área de llegada y en la sala de última espera, logrando una capacidad de 600 pasajeros en hora pico. (Fuente: Granma)