La Habana, 11 nov (RHC) Un total de 98 ensayos clínicos se realizan actualmente en todo el país para diferentes tipos de enfermedades, informó el doctor Alberto Hernández Rodríguez, director del Centro Nacional Coordinador de Ensayos Clínicos (Cencec) en el contexto del VI Taller Internacional de Diseño y Conducción de Ensayos Clínicos, que concluye este viernes en el Palacio de Convenciones de La Habana.
El 67 %, dijo el especialista, está dedicado al tratamiento de diferentes afecciones en el cáncer, en distintas localizaciones de esta enfermedad maligna, fundamentalmente con vacunas terapéuticas de instituciones de punta de la biotecnología cubana, como el Centro de Inmunología Molecular (CIM), el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), así como otras entidades de la capital y del país, refiere el diario Granma.
Hernández Rodríguez subrayó que se están abordando también algunas enfermedades, como son las cardiovasculares, neurológicas, y dermatológicas; pero los esfuerzos se están centrando, fundamentalmente, en el cáncer, porque este se encuentra junto a las enfermedades del corazón entre las primeras causas de muerte en el país.
Sobre la reciente aprobación del desarrollo de un ensayo clínico en Estados Unidos para la vacuna contra el cáncer de pulmón, Cimavax, ya aprobada en nuestro país, explicó el director del Cencec que este tiene el objetivo de ver si la vacuna cumple la misma expectativa, eficacia y seguridad de los ensayos que se obtuvieron aquí en Cuba, los cuales fueron desarrollados por el Cencec.
En 25 años de trabajo esta institución acumula numerosas fortalezas, entre las que el entrevistado destacó el haber realizado más de 150 ensayos clínicos de 28 productos de la biotecnología y de la industria químico farmacéutica cubana en más de 25 indicaciones, entre ellas el cáncer, pero de igual modo en otras como el vitiligo o las enfermedades del corazón. En ese sentido puso de ejemplo la estreptoquinasa recombinante, aprobada en la década del 90, la cual produjo una disminución importante de la mortalidad por infarto del miocardio.
Otro de los logros de este centro, dijo, es contar con el registro cubano para los ensayos clínicos, el cual le da transparencia a esta actividad, además de ser el primer registro en español y latinoamericano aprobado por la Organización Mundial de la Salud.
El Cencec tiene diseñado un sistema de formación de postgrado en la temática de ensayos clínicos, que incluye cursos, diplomados y maestrías, y que representa una ventaja, pues pocos países lo tienen, explicó.
Los desafíos de esta institución Hernández Rodríguez los sitúa en continuar realizando ensayos clínicos que acerquen más rápido el resultado de un medicamento a los pacientes. «Estamos trabajando con diseños novedosos para tratar de que se aprueben productos biosimilares. Es algo nuevo en el mundo, pues teniendo en cuenta que el producto original es demasiado costoso para la terapéutica de los pacientes, y un mes de tratamiento para el cáncer por ejemplo puede superar los 30 000 dólares por enfermo, Cuba está entre el reducido número de naciones que está estudiando los biosimilares para desarrollarlos».
Los ensayos clínicos en la atención primaria de salud para lograr acercar el tratamiento a las personas y hacer más accesible la salud pública cubana, es otra de las tareas en las que está inmerso el Cencec.
Numerosas temáticas relacionadas con el quehacer de esta institución, y otros tópicos vinculados a los adelantos de la metodología de los ensayos clínicos, la ética y la bioestadística en la investigación, entre otros, fueron abordados por especialistas cubanos y extranjeros en el Taller que culmina hoy.
En el encuentro —que acogió además el II Encuentro de Conocimiento, Información y Evidencias en Salud, el Seminario de Actualización de Ensayos Clínicos en Oncología y el Taller Algoritmo de Investigación para el desarrollo de fitomedicamentos— se debatió sobre los dilemas de la evidencia sanitaria; la ciencia y la seudociencia en el contexto cubano y la importancia de la comunicación transparente de los resultados de investigación científica; las experiencias regulatorias en el manejo de los ensayos clínicos y el rol de los mismos en la introducción de nuevas terapéuticas en el sistema nacional de salud, entre otros aspectos.