Kinshasa, 2 nov (RHC) La localidad de Vuhovi reportó la víspera el primer fallecido por la epidemia de ébola en la República Democrática del Congo, a tres meses de su comienzo en el poblado rural de Mangina.

La víctima fue un hombre, cuya esposa murió en el Centro de Tratamiento contra el Ébola en Butembo, que se negó a recibir la curación, informó el Ministerio de Salud.

El congoleño fue uno de los cuatro decesos reportados con fecha 31 de octubre -los datos disponibles más actualizados- en la provincia de Kivu del Norte, en el noreste del país.

Sumados 35 casos probables (sin posibilidad de extraer muestras para pruebas de laboratorio), la epidemia ya dejó 179 muertos de los 279 afectados por la fiebre hemorrágica. De ellos 244 fueron confirmados.

Las estadísticas publicadas por el Ministerio dieron cuenta que se curaron 81 personas, mientras existen 51 sospechosos, 32 de ellos de Beni, convertido en epicentro de la dolencia, que puede causar hasta 90 por ciento de letalidad.

Hasta el momento fueron vacunadas 24 mil 800 personas, incluido personal de salud en la primera línea de combate a la enfermedad, los niños y contactos de los enfermos.

La décima epidemia, que también afecta a la vecina provincia de Ituri, amenaza convertirse en la tercera más mortífera desde que se descubrió en 1976.

La más letal sucedió en 1976 en Yambuku, en el norte del país, con saldo de 318 enfermos y 280 muertos. En tanto, que la tercera ocurrió en 2007 en Mweka (centrosur) con 264 y 187, respectivamente.

Con más de un millón de habitantes, la estrategia de salud en Beni está marcada por la acción de grupos armados irregulares, que incluso atacaron equipos médicos.

Igualmente, la población se negó inicialmente a vacunarse y a recibir la atención médica, que el gobierno decretó con carácter gratuito.

Altamente infeccioso, el virus del ébola se transmite por el contacto con fluidos de personas y animales infectados. El hospedero puede ser vivo o muerto. (Fuente: PL)