Uno es de la primera generación de graduados, en 2005, el otro recibió su título cuatro años después.
Ambos, desde los postulados adquiridos, se entregan día a día en la batalla contra una pandemia que en esta nación austral ya deja más de mil 800 casos, de ellos 79 muertos, cifras con tendencia a elevarse aún más en mayo, cuando se espera el pico.
En estas últimas semanas, cada uno desde su lado, da la batalla, Barbosa como intensivista en el hospital Cruce, de Florencio Varela, en la localidad de la provincia de Buenos Aires, que al igual que la capital argentina concentra la mayor cantidad de infectados.
Me recibí en Cuba en la quinta promoción, año 2009, y desde terapia intensiva trabajo haciendo todo lo que pueda. Soy médico de guardia, hago 24 horas por semana y a veces un poquito más. Nos vamos dividiendo en cuanto al cuidado a los pacientes y la verdad estamos bien preparados, contó Barbosa vía WhatsApp a Prensa Latina.
Hacemos todo lo que podamos para vencer a esta pandemia, agrega este médico, quien manda mucha fuerza a todos sus colegas de la ELAM que hoy salvan vidas. Cada uno puede ayudar este dónde este, siempre colaborando y tomando las medidas para combatir esta enfermedad, subraya.
Barbosa cuenta que su hospital tiene a cargo otros centros sanitarios de campaña que se están armando en el país donde se tratarán a pacientes con Covid-19. Trabajamos con protocolos, es un momento bastante duro, dice, donde todos aprendemos a medida que va pasando el tiempo y tratando a estos pacientes.
Este joven médico agradeció a Cuba por haberle permitido estudiar allá y cada vez que escucha sobre galenos de esa isla caribeña que en época de pandemia están de misión por todo el mundo, siente mucho orgullo.
Quiero que les llegue mi apoyo desde Argentina, son médicos que dejan familia en Cuba para irse de misión. No hay más palabras que agradecimientos, me siento orgulloso de saber que estudié en ese país, quiero brindarle el apoyo a mis compañeros que se recibieron conmigo, expresa Barbosa quien envía un abrazo a sus colegas cubanos que cumplen misión.
Desde su especialidad en medicina general y familiar, Carlos Rafael Domínguez, quien fue de la histórica primera generación de graduados de la ELAM, en 2005, actualmente trabaja en la atención de traslado de pacientes de riesgos.
Las horas que nos tocan vivir son muy complejas a raíz de esta pandemia, todos los graduados de la ELAM contamos con un gran compromiso humano y moral que adquirimos con la medicina cubana, que es una marca distintiva de nosotros, subrayó a Prensa Latina.
(Prensa Latina)