Washington, 5 oct (RT).- Un abogado de 29 años de Georgia (EE.UU.) se infectó por primera vez con el coronavirus en marzo y estuvo enfermo durante Semana Santa, antes de que su cuerpo lograra, a principios de mayo, superar el covid-19 y desarrollar anticuerpos.
Imagen ilustrativaVincent West / Reuters
Días más tarde, el 18 de mayo, Jordan Josey donó plasma y dos semanas después recibió una carta en la que se le confirmaba que tenía anticuerpos contra el coronavirus. Además, una prueba de hisopo que le realizaron en ese momento confirmó que dio negativo por covid-19. Jordan fue recuperando gradualmente su estilo de vida habitual y a finales de junio decidió ir a visitar a su familia en Carolina del Sur.
No obstante, justo antes del 4 de julio Josey volvió a experimentar síntomas del covid-19 y dio positivo de nuevo. Esta vez la enfermedad lo dejó casi inactivo durante cuatro semanas y le robó nuevamente la resistencia pulmonar. También aparecieron síntomas que diferían de su primer caso, como una fatiga tan severa que sus médicos le hicieron pruebas de mononucleosis, además de pérdida de apetito y de peso.
"En julio, me habría cansado con solo hablar. No habría podido sobrevivir esta conversación telefónica", dijo a la CNN. "Todavía estoy tomando inhaladores de esteroides para ayudar a mantener a raya la dificultad para respirar", agregó.