Londres, 7 may (RHC) Un estudio de un equipo de científicos de la Universidad de Sídney (Australia) desmintió la relación entre el uso de móviles y el cáncer cerebral, se conoció hoy.
Para demostrar esa hipótesis los expertos procesaron los datos sobre los casos de neoplasia registrados en Australia desde 1982 hasta 2012, y analizaron el uso de celulares a partir de 1987, señala un artículo publicado en la revista Cancer Epidemiology.
En ese período la enfermedad fue diagnosticada en 19 mil 858 hombres y 14 mil 222 mujeres, señala el medio especializado.
Los investigadores dividieron todos los casos de cáncer en diferentes grupos según la edad (20-39 años, 40-59 años, 60-69 años y 70-84 años).
En tal sentido tomaron en consideración el nivel de riesgo del desarrollo de la enfermedad con un índice de 1,5 en los que usan móviles y 2,5 en los que lo hacen muy a menudo (un 19 por ciento de todos los usuarios).
Los resultados mostraron que el número de casos de cáncer a lo largo de 30 años se mantenía constante.
Según los autores solamente se observó un incremento entre los que tenían más de 70 años, pero los científicos niegan la conexión con los celulares debido a que el incremento comenzó en 1982, antes de la extensión del uso de estos dispositivos en ese país.
A propósito de ello atribuyeron una mayor detección de casos a principios de 1980 a los avances tecnológicos, como la aparición de la tomografía computada.
Un tumor cerebral es un crecimiento descontrolado de células derivadas de componentes cerebrales (tumores primarios) o de células tumorales localizadas en otras áreas del organismo, consideran los especialistas.
El diagnóstico de cáncer cerebral se realiza mediante exámenes imagenológicos que permiten conocer su localización y tamaño, además de sugerir la naturaleza del mismo, pero la biopsia es la que indica el tipo de tumor.
Por eso los expertos sugieren a los pacientes acudir a su área de salud ante la presencia de síntomas como visión doble, dolor en una extremidad, cefalea, vómitos, edema de papila y alteraciones visuales, entre otros.