Por: Guadalupe Yaujar Díaz
El 22 de diciembre de 1961, en el tercer año de la Revolución, Cuba proclamaba al mundo que era “Territorio Libre de Analfabetismo”. Ello colocó al país antillano entre las naciones de más bajo índice de analfabetismo en el mundo.
Precisamente, con el propósito de conservar para la posteridad los importantes documentos, materiales y testimonios de la gesta, se creó el Museo de la Alfabetización.
El museo, ubicado en Ciudad Libertad, fue inaugurado el 29 de diciembre de 1964. Ocupa parte de lo que fue el cuartel de Columbia, el complejo militar desde donde Fulgencio Batista inició su golpe de estado.
La sede se escogió por haber sesionado allí la Comisión Nacional de Alfabetización y, además, punto de partida de las Brigadas Conrado Benítez.
Atesora el centro la historia de esa epopeya, en la cual más de 700 mil cubanos aprendieron a leer y a escribir; y el índice de analfabetismo en la isla quedó reducido a 3,9 % de su población total. Más de 25 mil haitianos residentes en las zonas agrícolas de Oriente y Camagüey, quienes no dominaban el idioma español, los impedidos físicos y mentales, y las personas de avanzada edad o deficiente salud, fueron declarados inalfabetizables.
El recinto posee álbumes que contienen cartas de los alfabetizados, dirigidas a Fidel, una relación de fallecidos y mártires de la campaña, así como materiales técnicos, didácticos y faroles usados en la campaña, entre otros artículos.
La hermosa bandera roja y blanca, con letras azules de "Territorio Libre de Analfabetismo", que proclamó la ausencia de analfabetos en Cuba, ocupa un lugar destacado en el museo.
Enriquecen el lugar, la documentación de las Secciones Técnica, de Propaganda, de Coordinación y de Estadística, así como las Memorias de cada municipio, fotos, recortes de prensa, escritos de la época y murales estadísticos.
Muy relevantes resultan, también las fotos relacionadas con las actividades de recibimiento, estancia, desfile y regreso de los brigadistas que asistieron a la histórica concentración del día 22 de diciembre de 1961, para proclamar ante el mundo el triunfo de la campaña.
La gesta permitió erradicar el analfabetismo y facilitar el acceso, universal y gratuito, de los cubanos a los distintos niveles de educación.
Mártires de la alfabetización en Cuba
Como en muchas de las tareas revolucionarias los cubanos enfrentaron el terrorismo y el hostigamiento de los grupos contrarrevolucionarios, y la hermosa misión educativa no estuvo exenta, incluso, de la muerte de quienes participaban en la campaña como alfabetizadores o alfabetizados.
Ellos son Conrado Benítez García, Pedro Miguel Morejón Quintana, Modesto Serrano Rodríguez, Tomás Hormiga García, Delfín Sen Cedré, José Taurino Galindo Perdigón, Vicente Santana Ortega, Manuel Ascunce Doménech y Pedro Lantigua Ortega.
(Fuente. Dora Alonso El año 61, La Habana, Editorial Letras Cubanas, 1981, 100 pp. Colección Testimonio)