Las Tunas, ciudad del oriente cubanos
por Liodany Arias Tamayo
Ciudad peculiar, única y auténtica es Las Tunas en el oriente cubano, donde reposa y florece, como cactus silvestre, a las puertas de la región mambisa. Su fisonomía no muestra las grandes e icónicas construcciones al estilo de la antigua colonia española; sin embargo, un fuerte movimiento ecléctico se apoderó de sus fachadas y columnas desde el primer momento en que fuera quemada por los criollos locales.
Ciudad Las Tunas
Tres incendios bastaron para arrancar de la arquitectura los rasgos del imperio ibérico gracias a las valerosas decisiones de sus hijos, principalmente del Mayor General Vicente García González, quien el 26 de septiembre de 1876 prefirió incendiar su hogar antes de entregar la comarca al sangriento brazo de España. Pero las acciones ya tenían sus antecedentes cuando el General en Jefe del Ejército Libertador, Manuel de Quesada y Loynaz, dirigió operaciones similares el 16 de agosto de 1869 para debilitar la contraofensiva de la potencia hispana.
Por su estratégica ubicación, Las Tunas significaba poderío para el ejército enemigo como bastión seguro a la entrada de una de las zonas más disputadas durante las guerras de independencia. Así mantenían bajo su dominio, con importantes fortificaciones, a la urbe como necesaria plaza militar que les permitía dominar el paso entre Camagüey y Oriente, motivos suficientes para que en agosto de 1897 las tropas bajo el mando de Calixto García redujeran a cenizas las principales edificaciones del sitio.
Ciudad Las Tunas
El siglo XX sorprende a esta tierra completamente en ruinas y comienzan así a resurgir, cual ave Fénix, los inmuebles citadinos con clara visión ecléctica que reflejaban la libertad arquitectónica de gran diversidad de estilos e ideas según las posibilidades de sus creadores. Traspasan el juicio de los años los restos de las 28 columnas pertenecientes al cuartel español y otros elementos como argollas para amarrar caballos fijadas en nítidas partes de la carretera central.
Fachadas de la ciudad de Las Tunas
Más del 45% se levantó con este movimiento que había tenido sus inicios en Norteamérica y Europa desde el anterior milenio y el resto corrió a cargo del Art Deco, el racionalismo y protorracionalismo a menor escala ligados todos a la tendencia moderna de los chalet norteamericanos.
Los elementos decorativos que enarbolan sus casas de la céntrica avenida Vicente García reflejan lo más bello y exótico del terruño con viviendas altas con capiteles, balaustradas, arcos y columnas fundamentalmente en la Casa de la Cultura, la Biblioteca José Martí, el Museo Provincial Vicente García y la singular casona donde vivió el más bravo de los insurrectos tuneros.
Logia Masónica en Las Tunas
Con menor influencia pero de gran significación destaca el Art Deco en el boceto de interiores y fachadas, especialmente en las logias masónicas de la arteria Francisco Vega esquina a Nicolás Heredia y en las residencias ubicadas en el perímetro del Parque Central Vicente García, antiguamente conocido como Plaza de Armas. Confluyen de esta manera y con marcado respeto al patrimonio la majestuosidad de formas y expresiones artísticas de lo antiguo ante la nueva ola de lo moderno y su mezcla de originalidad.
El Centro Histórico, considerado entre los más pequeños del país, alberga 33 manzanas en 14 hectáreas donde convergen los estilos que representan más de 40 construcciones con predominio del racionalismo, reflejados en la actual Oficina de Cobro de Multas en la vía Francisco Varona y en la antigua cuartería en Joaquín Agüero, caracterizadas por su horizontalidad, muros de carga de 30 centímetros, balcones y aleros en voladizo y la presencia de pretiles como protectores para evitar caídas.
Plaza Martiana de Las Tunas
Andar las calles, plazas y parques significa adentrarse en un sinfín de gestas de fuego, sangre y valor que justifican, en gran medida, la sencillez y armonía del diseño de cada aspecto urbanístico, donde confluyen a menor escala el Art Deco y otras huellas de la metrópoli, lo que ratifica a Las Tunas como uno de los mayores exponentes eclécticos del país con 192 inmuebles reconocidos con el llamado estilo sin estilo.
Ciudad Las Tunas
Su simpleza es herencia de la dignidad derrochada en cada una de las páginas de su historia, de la grandeza de sus hijos y las ansias de crecer y reinventarse más allá de los obstáculos y avatares del tiempo, características que certifican el poder de su naturalidad para atrapar a cada visitante y mantenerse como el eterno Balcón del Oriente Cubano. (Tomado de ACN)