El Comandante de la Revolución cubana, Guillermo García Frías, inauguró en la central provincia de Ciego de Ávila la primera procesadora de leche de cabra del país, una moderna fábrica de tecnología argentina.
La obra tiene capacidad para procesar cerca de 1 500 litros de leche cada día, cuando estabilice su funcionamiento y disponga de todo el rebaño, ascendente a unas 2 500 cabras, pero incompleto aún.
A 430 kilómetros al este de La Habana, la unidad se encuentra ubicada en una zona rural de gran tradición en la producción ovino-caprina. Entre sus prestaciones, la planta dispone de una novedosa tecnología para el ordeño mecanizado, lo que entre varios propósitos facilitará abastecer a las instalaciones turísticas del país de este importante alimento.
Pablo Besada, director de la Empresa para la Conservación de la Flora y la Fauna, encargada en poner en funcionamiento la fábrica avileña, explicó que para aumentar el número de animales se dan los primeros pasos en la inseminación artificial, con vistas a obtener crecimientos productivos y mejorar la genética de la masa.