Por: Marlene Montoya Maza

En el Centro Histórico de la ciudad de Santiago de Cuba se erige, desde siglos atrás, un área conocida como : Placita de Santo Tomás, Placita de los Mártires y Parque Flor Crombet, este último es el nombre oficial y el menos utilizado para identificar el lugar de tanta historia.

Desde las guerras del siglo XIX hasta la última etapa de luchas acogió a cubanos que bajo la sombra de sus arbustos o en complicidad con las noches, compartían sus ideas libertarias.

Reseña la historia que en ese lugar solía reunirse también Frank País García, quien se convirtió en el jefe en la clandestinidad, con otros jóvenes que abrigaron tempranamente las ansias de libertad.

Hoy se honra con el apelativo de un veterano de las gestas del siglo XIX: el Mayor General Flor Crombet, nacido en El Cobre y quien se incorporó al Ejército Libertador con solo 17 años.

El obelisco que perpetúa su memoria está hecho con piedras de la mina del poblado santiaguero, que fue su cuna.

Muy cercano a Antonio Maceo, Flor Crombet tuvo entre sus misiones más importantes -la cual selló con su caída en combate- organizar la expedición que trajo a Cuba, desde Costa Rica, al Titán de Bronce, a su hermano José y otros el primero de abril de 1895 en la goleta Honor, para incorporarse a la Guerra Necesaria.

El parque con su nombre tiene en derredor sitios de gran valor histórico y patrimonial como la Iglesia de Santo Tomás, donde fue bautizado precisamente Antonio Maceo y muy cerca, en la calle Trinidad, vivió María Cabrales, esposa del jefe mambí a su regreso de Kingston, Jamaica.

En sus alrededores -en la calle San Fermín- radicó además la Sociedad Patriótico Militar Antonio Maceo, a principios del siglo XX.

Rodean también al histórico espacio público construcciones de varias épocas, como la colonial y republicana, que mantienen el estilo y brindan un toque singular en la arquitectura de ese entorno, apacible y que invita al descanso bajo los arbustos.

Es un parque muy querido en la barriada y por los santiagueros.

Por eso cada 30 de julio cuando se recuerda la caída de Frank País, ocurrida muy cerca, esa placita es escogida para rendir homenaje a todos los mártires de la Revolución en su día, por el profundo simbolismo que posee en una ciudad de tanta historia. (Fuente:ACN)