Monumento al Che en el Bosque de los Héroes, Santiago de Cuba.
Por Angela Santiesteban Blanco
Aunque su presencia está en cada espacio, en cada recuerdo, este 14 de junio, convoca a homenajear de forma diferente al revolucionario, cubano por adopción, y de origen argentino. En Santiago de Cuba, hay un sitio que hoy no podemos dejar de mencionar y describirlo por lo que significa para los habitantes de la Ciudad Héroe y para el país, el Bosque de los Héroes.
Quienes pasan por la avenida de Las Américas, dirigen su mirada a la colina más alta que posee la vía, donde desde octubre de 1973 se erige por idea del Comandante de la Revolución Juan Almeida Bosque, el primer monumento en Latinoamérica erigido al Che y su Guerrilla, el Bosque de los Héroes, realizado por la destacada artista Rita longa Aróstegui.
El conjunto escultórico está formado por 73 lápidas de mármol blanco, que fueron colocadas sobre una plataforma de granito, en las que se representan las imágenes y posiciones de la estructura organizativa creada por el Comandante Ernesto Guevara de la Serna en la guerrilla.
En los 15 paneles superiores aparecen talladas con la técnica de Hueco Relieve las siluetas con sus nombres y apellidos, grados militares, su provincia natal, seudónimos que tenían en la guerrilla, fecha de nacimiento y organización política a la que pertenecían, además del día y el lugar donde cayeron combatiendo cubanos y latinoamericanos.
Asimismo, en otros cuatro se exponen textos seleccionados del Diario del Che en Bolivia, que aluden las cualidades humanas de cada uno de ellos y los objetivos de la lucha.
En la parte más alta del monumento destaca una loza que simboliza al Comandante Ernesto Che Guevara, erguido con la mirada fija hacia la antigua fortaleza militar cuartel Moncada, la que al triunfo de la revolución fue convertido en la ciudad escolar 26 de Julio.
Entre estas piezas de mármol se alzan dos pinos bolivianos que simbolizan la inmortalidad, acompañados de bambúes que sugieren la cordillera de Los Andes y las selvas bolivianas; desde el fondo del monumento y hasta su base sale un tapiz de piedras chinas pelonas que simboliza las cuencas de los ríos Grande, Ñacahuasú y otros que fueron atravesados por los guerrilleros en su constante peregrinar.
Dos palmas reales significan la hidalguía y cubanía de las ideas de estos hombres, y el algarrobo la continuidad histórica de la epopeya. Mientras que la cañada y el muro de piedras rojas representan la Quebrada del Yuro.
El Conjunto Escultórico fue develado el 15 de octubre de 1973, para rendir homenaje al Che Guevara y a sus compañeros caídos en Bolivia.
Ese lugar, se ha convertido en el escenario para realizar el cambio de atributos pioneriles, reconocimientos a trabajadores, jóvenes, estudiantes, innovadores y muchos otros hombres y mujeres destacados.
Por coincidencias de la vida Rita Longa Aróstegui, nació un 14 de junio, pero de 1912 en La Habana, y fue una de las más importantes artistas que Cuba, quien le regaló al mundo esculturas en mármol, bronce y madera, convirtiéndola en una de las figuras artísticas más emblemáticas del siglo XX cubano. (Tomado de sierramaestra.cu)
