Por Iris Armas Padrino
El Hospital Universitario General Calixto García, de La Habana, considerada la institución de su tipo de mayor importancia histórica en Cuba, arriba rejuvenecido a sus 120 años y con un impacto notable en la atención médica.
Fundado el 23 de enero de 1896, ese centro asistencial, cátedra y símbolo de la medicina cubana, se distingue en la preparación de recursos humanos y en sus predios se han formado y consolidado verdaderas escuelas, que han hecho posible el desarrollo científico en el campo de las ciencias médicas cubanas actuales.
Su director, el doctor Carlos Alberto Martínez Blanco, en conversación con la Agencia Cubana de Noticias rememora el surgimiento del centenario centro, que en esa fecha, tras la clausura del antiguo Hospital Militar de "San Ambrosio", recibió el nombre de Hospital Militar "Alfonso XIII", en honor del niño rey de España.
Ese vetusto inmueble, de gran significación para la sanidad militar de la entonces metrópoli, en la guerra atendió a unos 44 mil soldados suyos aquejados de enfermedades infecciosas.
Al cesar la dominación peninsular, los norteamericanos mejoraron las edificaciones y lo utilizaron para sus tropas, denominándolo Hospital número Uno, y el primero de julio de 1900 se abrió al público hasta que alrededor de 1914 fue demolido para levantar el “Calixto García”.
En 2015 este recinto asistencial atendió a unos 150 mil casos en consulta externa, con una descollante proyección comunitaria hacia los municipios de La Habana del Este, La Habana Vieja, Centro Habana, Plaza de la Revolución y el especial Isla de la Juventud.
Asimismo superó los 150 mil ingresos, y más de 200 mil pacientes se atendieron por urgencias (600 como promedio diariamente), de los cuales dos mil fueron intervenidos quirúrgicamente, precisó el directivo.
En el área de investigaciones están registrados 26 proyectos institucionales, 110 de residentes y cuatro asociados a programas nacionales del Ministerio de Salud Pública, y se encuentran en curso seis ensayos clínicos y uno preclínico de conjunto con prestigiosos centros de investigación de la industria médico-farmacéutica e internacionales, dijo Martínez Blanco.
El también diputado de la Comisión de Salud y Deportes, del Parlamento cubano, refiere que en medio del proceso inversionista, en ese hospital no se ha detenido el quehacer docente, asistencial y científico, y se trabaja para convertirlo de referencia.
Como parte del amplio proceso de mantenimiento y reparaciones que incluyen 42 objetos de obra, ya se concluyeron 28, entre ellos, el Pabellón Marino Rojas, donde se concentran los departamentos de laboratorio clínico, microbiología, banco de sangre y registros médicos.
También culminaron el Pabellón Gordon de Anatomía Patológica, el área de mantenimiento y transporte, y el resto se encuentra en ejecución, precisó el galeno.
De referencia para múltiples atenciones, ese coloso de la medicina tiene 37 especialidades, excepto pediatría, ginecobtetricia y cirugía cardiovascular, y se distingue también por su alta capacidad en la atención a quemados y a pacientes politraumatizados.
Rememoró que en el anfiteatro, generaciones tras generaciones de profesionales han recibido conferencias, han participado en discusiones, eventos y actos, y allí "hasta nuestro querido Julio Antonio Mella alzó la palabra en lo que fue aquella Reforma Universitaria".
En ocasión del aniversario 120, esta semana se celebra la IX edición de la Convención Científica Calixto 2016, dedicada a una figura emblemática de la medicina cubana: el Profesor de Mérito Doctor Fidel Ilizástegui Dupuí, quien tuvo una importante participación en el diseño de los programas de estudio de la carrera de Medicina.
Profesionales de todo el país se dan cita en este foro, que deviene intercambio de experiencias en diversos temas y especialidades médicas.
"Todo ello enmarcado en las dinámicas transformaciones necesarias que se realizan en el sector de la salud, como parte de los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución, en el que la premisa indispensable es el mejoramiento de la calidad de la atención médica a nuestro pueblo", enfatizó.
Martínez Blanco resaltó la fortaleza del sistema de salud y de ese ejército de batas blancas que, “a pesar de las dificultades, continúan dando todo el esfuerzo y sacrificio necesario para garantizar la salud del pueblo y de otros que lo necesiten”, concluyó.
(Tomado de la ACN)
