por Roberto Morejón

La seguridad en los aeropuertos, un compromiso de Cuba con todas las compañías que vuelan hacia aquí, se reafirma con el reinicio de las conexiones regulares directas entre Estados Unidos y este destino, luego de más de medio siglo de suspensión.

Cuando el 31 de agosto la empresa Jet Blue se convierta en pionera en restablecer los enlaces continuos, se dará un paso positivo más en el complejo y necesariamente prolongado proceso de normalización de relaciones entre los dos países.

La ruta inicial entre las ciudades de Fort Lauderdale, en la Florida, y Santa Clara, en la central provincia de Villa Clara, ayudará a concretar uno de los acuerdos más importantes suscritos por los dos gobiernos luego del histórico anuncio del 17 de diciembre de 2014.

Representantes de ambos países pusieron de relieve la seriedad y profesionalidad evidenciadas para materializar 110 conexiones diarias de aerolíneas comerciales estadounidenses a Cuba.

NO hay lugar para las críticas formuladas por algunas fuentes sobre la supuesta inseguridad en las terminales aeroportuarias del país caribeño.

Cuba posee 10 aeropuertos internacionales en los que operan con normalidad más de 110 aerolíneas foráneas en enlaces regulares y charters.

A pesar del bloqueo, los cubanos garantizan las operaciones adecuadas en las terminales de entrada al país y están dispuestos a seguir en conversaciones con los técnicos de las aerolíneas autorizadas por el Departamento de Transporte del país norteño.

Lo anterior NO niega la necesidad de Cuba de modernizar la infraestructura aeroportuaria que beneficiará tanto a los vuelos regulares de las empresas estadounidenses como a las restantes.

Mientras se ejecutan los acuerdos firmados en ese sentido y se conversa para rubricar otros, se abrirán de manera segura las puertas de Cuba a viajeros estadounidenses que logren calificar dentro de las 12 categorías autorizadas por su gobierno.

El turismo sigue prohibido para los estadounidenses y otros fardos del bloqueo se mantienen incólumes, a pesar de las prerrogativas del presidente Barack Obama, quien apeló a algunas, pero se abstuvo de hacerlo en otras.

Los cubanos consideran positivo el acercamiento sobre bases respetuosas y apego a la soberanía e independencia, como va a ocurrir con los vuelos regulares directos, aunque rechazan los intentos de profundizar los planes subversivos.

Uno de ellos es la convocatoria a una conferencia en Miami con el objetivo de utilizar Internet para desestabilizar a la mayor de las Antillas, bajo el paraguas financiero de la Oficina de Transmisiones hacia Cuba.

El inminente restablecimiento de vuelos regulares directos entre Cuba y Estados Unidos es una señal promisoria que contrasta con otra perturbadora, la del conciliábulo en Miami.