Por: Roberto Morejón

Directivos del Ministerio cubano de Educación, de escuelas y los maestros ultiman los preparativos del inicio del próximo curso escolar, a pesar de las dificultades económicas del país.

En medio del recrudecimiento del bloqueo estadounidense y contratiempos en el acceso a créditos y en las exportaciones, la mayor de las Antillas afronta una compleja situación económica.

Es cierto que el Estado reservó 23 por ciento del presupuesto de la nación de 2019 para la educación, como reflejo de la relevancia otorgada a ese sector como formador de generaciones y de pensamiento.

Pero los recursos materiales son insuficientes para atender todas las reparaciones de escuelas al unísono junto a otras erogaciones.

Cuba posee 10 por ciento de planteles dedicados a la enseñanza evaluados de regular o mal desde el punto de vista arquitectónico, y colectivos de la construcción trabajan para reducir esa cuantía.

En medio del sofocante verano de esta nación caribeña obreros de diversas instancias oficiales prosiguieron el plan de reparación, mantenimiento e inversiones en los colegios.

De un plan de mil 412 para someterlos a remozamiento, los trabajadores concluyeron 617 y se ocupan de otros 578.

En cualquier caso, en el próximo período lectivo la matrícula de más de un millón 700 mil alumnos tendrá aulas y escuelas aseguradas.

A fin de calzar ese objetivo se reubican alumnos para resolver el problema de capacidades cerradas por estar en plan de remozamiento.

Además, en todos los establecimientos de enseñanza está confirmada la base material de estudio indispensable con instrucciones de cuidarla con esmero y reparar la que sufra roturas.

La orientación fue necesaria porque el país no tiene el patrimonio suficiente para reponer con equipamiento nuevo los reportados con desperfectos.

Funcionarios ministeriales destacaron la buena situación del alumnado en Cuba al contar en sus aulas con medios esenciales como libretas, lápices, tizas y otras útiles de los maestros.

Sin embargo, hojas, instrumentos para las artes manuales y de higiene serán suministrados gradualmente.

Igualmente, en todos los tipos de enseñanza están creadas las condiciones con vistas a mantener con normalidad la situación epidemiológica y mejorar la cobertura médica.

Como se aprecia, el país realiza un esfuerzo concluyente a fin de iniciar una etapa lectiva con los soportes esenciales, sin renunciar a principios básicos, como el acceso gratuito e igualitario para todos los niños y jóvenes.