Por: Roberto Morejón

Los cubanos están preocupados por el golpe en Bolivia, con cuyo pueblo y dirigentes sostuvieron una relación muy cordial, como se ejemplifica en la atención otorgada por el líder histórico Fidel Castro.

El estadista, de cuya desaparición física se cumplen tres años, estudió con avidez las luchas e historia de los pueblos de América Latina y el Caribe.

En esa línea siguió el proceso que desembocó en la asunción a la presidencia en 2006 de Evo Morales, quien resguardó después los recursos naturales y amparó a sus compatriotas más vulnerables.

La visita del destacado pensador cubano a Bolivia en 1993 fue memorable, al pronunciar importantes discursos y conversar con dirigentes, políticos y el pueblo.

Mucho antes se había interesado porque la asistencia de un contingente médico cubano a Bolivia ante una catástrofe natural se convirtiera en una labor permanente, a fin de brindar servicios a personas con escasos recursos.

Con la anuencia del gobierno boliviano, inició 13 años atrás la colaboración de salud de la mayor de las Antillas con una población que, en selvas y montañas, en muchos casos recibió por primera vez la visita de un médico.

Más de setecientos mil bolivianos recobraron la visión tras operaciones oculares conducidas por especialistas cubanos.

Cuentan actores de las primeras misiones que Fidel Castro se interesaba directamente por el impacto de las faenas de los enviados de Cuba y el sentir de los beneficiados.

Ahora, cuando los profesionales de Cuba debieron partir de Bolivia ante amenazas a su integridad física por el golpe de estado, recordamos que más de 8 mil de ellos pasaron por aquel territorio.

Ese noble pueblo expresó gratitud. Allí donde una vez Ernesto Che Guevara sembrara su espíritu de lucha muchas personas humildes evocan a Fidel Castro.

El primer mandatario boliviano Evo Morales asistió el 27 de octubre de 2018 a la inauguración de la moderna escuela nombrada Fidel Castro, en el municipio La Asunta, departamento de La Paz.

Evo manifestó su sorpresa por la decisión de los lugareños de escoger el nombre mencionado para el plantel y dijo:

“Un aplauso para ustedes. Debemos reconocer a un líder mundial, uno que luchó por los pobres, uno que hizo respetar la dignidad y soberanía de su pueblo, con su pueblo unido”.

Los pasajes más sobresalientes de las relaciones entre cubanos y bolivianos están matizados por la honestidad, el respeto a las realidades de cada país, la no injerencia y la solidaridad.

Nadie podrá tergiversar esos principios nunca violados.