Por María Josefina Arce
Cuba y Serbia conceden especial importancia a sus relaciones, que hablan de la cooperación y amistad entre dos pueblos, decididos a continuar fortaleciendo y ampliando el histórico vínculo que se remonta a más de un siglo y que cobró fuerza tras el triunfo de la revolución cubana en enero de 1959.
Ese ha sido el sentimiento expresado durante la breve, pero emotiva visita en las ultimas horas del presidente cubano, Miguel Díaz Canel, a Belgrado, dónde fue recibido como un gran amigo.
Fraternal y transparente fue el encuentro con su homólogo serbio, Aleksandar Vucic, quien en su viaje en 2017 a La Habana afirmó sentirse como en casa.
En las conversaciones entre ambos mandatarios primó el interés de potenciar la colaboración en sectores como la salud, el turismo, la agricultura, el deporte y la biotecnología. En esta última rama se trabaja actualmente en el registro en el país europeo de una amplia gama de medicamentos cubanos.
El turismo es también otra esfera en la que se impulsa la cooperación bilateral, ya que los turoperadores serbios califican a la nación caribeña como un destino muy interesante, con grandes potencialidades.
Como parte de la voluntad de incrementar los nexos económicos, el pasado año se realizó el seminario en línea "Serbia-Cuba: Oportunidades de negocios", en el que la Cámara de Comercio de la Mayor de las Antillas y la Cámara Económica del país balcánico suscribieron un Plan de Acción para 2022 y 2023.
De hecho el mandatario cubano expresó en la capital serbia su optimismo y confianza en que los nexos bilaterales continuarán fortaleciéndose en beneficio de los dos pueblos.
En el plano político, mutuo ha sido el apoyo en temas claves como la defensa de la soberanía y la integridad territorial de Serbia, y su voto favorable a la resolución contra el bloqueo norteamericano que cada año presenta Cuba ante la Asamblea General de la ONU.
A las positivas relaciones han contribuido los contactos al más alto nivel entre los dos estados. En agosto del pasado año nos visitó el canciller serbio, Nikola Selakovic, y dos semanas después fue recibido en Belgrado el ministro cubano de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez.
Más recientemente, en febrero último, estuvo en el archipiélago la viceprimera ministra y titular de Cultura de la nación europea, Maja Gojkovic. Durante su permanencia en territorio cubano fue suscrito un acuerdo de cooperación sobre cine.
La visita del presidente cubano a Serbia viene a confirmar la excelencia de las relaciones bilaterales y el interés mutuo de continuar ampliando y diversificando la cooperación económica y comercial.