Imagen ilustrativa tomada de Archivo/RHC
Por María Josefina Arce (RHC)
En pocas horas cumplirá un nuevo aniversario un mecanismo de integración que ha marcado un antes y un después en América Latina y el Caribe.
Durante cerca de dos décadas la hoy ALBA-TCP, Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos, ha incentivado la colaboración, sustentada en la solidaridad y el respeto.
En el centro de atención ha estado siempre el contribuir al bienestar de los pueblos. No podía ser de otra manera, cuando el surgimiento de este bloque se debe a la iniciativa de dos hombres de gran humanismo como el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro Ruz (1926-2016), y el presidente venezolano, Hugo Chávez Frías (1954-2013).
Nació en momentos en que Estados Unidos pretendía imponer a la región el ALCA, Área de Libre Comercio para las Américas, un plan de dominación, en detrimento de la soberanía de los pueblos.
Múltiples son los proyectos desarrollados en estos años por ALBA-TCP, especialmente en la salud y educación, que han beneficiado a millones de latinoamericanos y caribeños de escasos recursos.
Foto: Alberto Borrego
Destaca en educación la alfabetización de unos cinco millones de pobladores del área con el método cubano "Yo sí puedo", y la declaración por la UNESCO, Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, de Territorio Libre de Analfabetismo de Venezuela, en 2005, Bolivia, en 2008, y Nicaragua, en 2009.
Un hito fue el estudio clínico, genético psicosocial de las personas en situación de discapacidad, y que permitió la articulación de políticas a favor de este sector poblacional en seis países del ALBA-TCP.
La pandemia de la COVID 19 fue un desafío para todas las naciones, pues puso a prueba los sistemas sanitarios. Ante el reto, los países miembros del mecanismo evidenciaron una vez más su unidad y compromiso con la vida.
El Banco del ALBA estableció un puente humanitario para el traslado de vacunas, personal sanitario e insumos para varios países del área.
Asimismo se estableció un fondo de dos millones de dólares como alivio económico al Caribe para la compra de inmunógenos.
Cuba envió a Estados del bloque a trabajadores de la salud para ayudar al enfrentamiento a la enfermedad causada por el nuevo coronavirus.
La Mayor de las Antillas por su parte, recibió valiosos donativos de sus hermanos del ALBA-TCP, ante el recrudecimiento del bloqueo norteamericano en medio de la emergencia sanitaria.
En este nuevo aniversario, ALBA-TCP continúa siendo un bloque imprescindible para avanzar en el desarrollo de nuestros países y el bienestar de sus ciudadanos, en medio de un mundo cada vez más desigual.
