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José Ángel Portal Miranda (I), ministro de Salud Pública, recibe cheque de lo recaudado en la subasta de humidores.
Por: Roberto Morejón
Los festivales del habano son representativos de un año de trabajo en Cuba, donde se encumbra mediante un certamen con carácter comercial y cultural una industria capaz de ofertar a sus clientes los famosos puros, hechos a mano, considerados los mejores del mundo.
En medio de una acentuada crisis económica, cuya causa esencial se vincula con el bloqueo estadounidense, la agricultura y la industria del tabaco se sostienen, no sin dificultades, ante carencias de insumos o por no poder acceder al mercado de la potencia del Norte.
Resulta meritorio entonces el resultado exhibido por Habanos, Sociedad Anónima, empresa mixta compartida por el Estado cubano y un consorcio español.
En la recién finalizada vigésimo quinta edición del Festival del Habano, informaron sobre 827 millones de dólares en ganancias, 16 por ciento más en relación con 2024, en una clara línea ascendente luego de la pandemia.
El festival volvió a encadenar su aspecto comercial con el cultural, dado el nexo indisoluble de la cosecha y producción tabacalera con la historia y tradiciones de la mayor de las Antillas.
Un seminario internacional y la feria comercial así como visitas a las famosas vegas del extremo occidental y a fábricas de torcedores, permitieron a los más de tres mil asistentes de 110 naciones relacionarse con la esencia del habano.
Detrás de él, subrayaron funcionarios, hay manos expertas y compromiso con la excelencia, de ahí el crecimiento de mercados en Asia y Europa, y que los puros estén presentes en 130 territorios, a través de 27 marcas Premium y más de cien formatos y 400 referencias comerciales.
Como es tradicional, el festival concluyó con una gala y la subasta de humidores exclusivos, o sea, las cajas de madera donde se guardan los puros para conservar su grado de humedad.
Los fondos recaudados en la licitación fueron entregados al Sistema de Salud Pública de Cuba, sin ninguna duda, a pesar de que la llamada prensa independiente, financiada desde el exterior, trató de arrojar dudas sobre ese destino.
El gratuito sistema de salud en la nación caribeña necesita de aprovisionamientos financieros, para sostenerse aun en condiciones normales, las cuales no existen hoy, dado el cerco robustecido de Washington.
Como los países árabes promueven su petróleo, Francia sus vinos y Bolivia su litio, Cuba convoca a sus festivales del habano.
En ellos agasajan a los torcedores, vegueros, agentes comercializadores y de marketing, pues esta industria avanza con el aporte de muchas personas y entidades.