Por: Lorenzo Oquendo
Entre los acontecimientos de mayor connotación noticiosa mundial por estos días está, sin dudas, la cumbre del clima de la Organización de Naciones Unidas en Katowice, ciudad de Polonia, evento conocido como COP24.
La cita ambiental comenzó este 3 de diciembre y concluye el 14 del propio mes donde asisten 30 000 delegados procedentes de 200 países con el objetivo de lograr las metas establecidas de París para que el calentamiento global no sobrepase de 1,5 grados centígrados.
Allí están reunidos especialistas, profesionales, representantes de entidades, instituciones y jefes de estado de varias naciones, quiénes deben precisar bien las decisiones que eviten una catástrofe ambiental a iniciarse en 20 años si coninúa el aumento gaseoso de efecto invernadero en el mundo.
Realmente el acuerdo fundamental de esta cumbre debe concretarse en la gradual eliminación de los combustibles fósiles destinados a necesidades energéticas, porque no existe tiempo para estar de cumbre en cumbre climática con perjudiciales indecisiones.
La razón debe imponerse, no espera más, como especificó en este evento del clima Antonio Guterres, secretario general de la Organización de Naciones Unidas sobre apostar por la economía verde y no por la gris de la economía carbonizada donde es indispensable respetar el medio ambiente e invertir recursos que enfrenten los impactos del cambio climático.
Las intervenciones durante esta Cumbre del Clima destacan por la cordura que ejemplificó el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, quién manifestó como su país reducirá en 37 por ciento las emisiones de gases de efecto invernadero para el 2030 y alcarzará el 90 al arribar al año 2050, un propósito positivo a realizar.
Sin embargo, la ambigüedad sobresalió con la exposición del presidente de Polonia, país anfitrión de la cumbre, al expresar el requerimiento de disminuir el calentamiento global pero con el atenuante de un proceso evaluativo porque esa nación depende del 80 por ciento del carbón para producir energía.
En estos tiempos las ideas, proyectos, evaluaciones y procesos están en pleno retraso debido a que las medidas no pueden esperar más su aplicación para detener la irreversibilidad climática si el mundo eleva la temperatura a tres grados centígrados.
Las fuentes renovables de energía están a la espera de mayores aplicaciones para preservar el entorno natural.
¿Tendremos favorables decisiones en esta Cumbre del Clima en Polonia ? Esperemos.
