Imagen de archivo/RHC
Por Alfredo García Almeida*
“El dicho popular, genio y figura hasta la sepultura, se usa para evidenciar esas características de las personas que no cambian con el paso del tiempo. El genio asociado al carácter y la figura a la apariencia”.
Aderezado con su histriónico narcisismo, prepotencia y arrogancia que lo caracteriza, el expresidente, Donald Trump, incorporó de nuevo el tema migratorio en su campaña electoral, que tan buen resultado le dio con el “muro fronterizo” en la elección anterior, prometiendo esta vez, la “deportación masiva” de indocumentados, al mismo tiempo que lanzaba una diatriba contra el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
En la entrevista con el periodista conservador, Dan O'Donnell, en su programa radial, El Show de Dan O'Donnell, el pasado 1 de abril, Trump declaró que, si es elegido, “no tendrá otra opción”, que deportar a millones de “extranjeros ilegales criminales” que, según dijo, están “envenenando a este país”.
Mientras que en una entrevista con la cadena, Fox News, el pasado 31 de marzo, Trump interpretó la propuesta del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, sobre el tema migratorio, como una “falta de respeto” hacia el presidente Biden. “Dijo que quiere 10,000 millones de dólares esencialmente solo para hablar, 10,000 millones de dólares para hablar, eso no tiene sentido y eso no sucedería conmigo”, declaró Trump, desestimando la propuesta del “amigo” que ya no estaría al frente del gobierno mexicano, de regresar Trump a la Casa Blanca en enero de 2025.
La propuesta de López Obrador sobre migración, comunicada a Biden durante una conversación telefónica el pasado 4 de febrero, contempla entre otras medidas, la regularización de los mexicanos que residen en EEUU, la entrega anual de 20.000 millones de dólares por parte de Washington a los países más pobres de la región para impulsar sus economías, levantar las sanciones económicas contra Venezuela y terminar el bloqueo comercial de Cuba, para contener el flujo migratorio de ambos países.
A pesar que Trump ha prometido mano dura contra la migración indocumentada, de acuerdo a la más reciente encuesta del diario, The New York Times, del pasado 2 de marzo, el 46% de los electores hispanos se inclinan a votar por el candidato republicano, mientras el 40% dice que lo haría por Biden. Desde 2021, se han registrado 9 millones de ingresos de indocumentados en todo EEUU, de los cuales más de 7,4 millones se produjeron en la frontera sur con México.
De acuerdo a una encuesta realizada el pasado marzo por Associated Press-Norc Center for Public Affairs Research, alrededor de 2/3 de los estadounidenses, desaprueban la forma en que Biden está manejando la seguridad fronteriza, incluyendo casi 4 de cada 10 demócratas, el 55% de los adultos negros y el 73% de los adultos hispanos, grupos de electores que Biden necesita para ganar la reelección.
Si hay algún mérito que reconocer en el expresidente, Trump, es que dice lo que piensa. Facilitó su triunfo, en la primera elección. Impulsó su derrota, en la segunda elección. Y lo hará desaparecer de la agenda política de EEUU, en la tercera elección.
* periodista, analista internacional colaborador desde Mérida, Yucatán.
