La Habana, 4 ago (RHC)- La República de Corea evaluará la próxima semana el impacto medioambiental del sistema de defensa antimisiles estadounidense THADD, desplegado en el sur del país en abril último, anunció hoy el ministerio de Defensa.
El estudio responde a la evaluación iniciada en diciembre pasado y planea revisar el nivel de radiación electromagnética y de ruido del THADD, antes de la instalación de cuatro nuevas lanzaderas que entraron al país de manera confidencial.
Una investigación reciente sobre el hecho, reveló que el ministerio de Defensa omitió intencionalmente la información para que la batería parezca más pequeña y evadir dicho estudio.
Surcorea pactó con Estados Unidos proporcionar 700 000 metros cuadrados para el despliegue del escudo antimisiles, sin embargo el ministerio de Defensa reportó 320 000 inicialmente, y luego registraría los 380 000 restantes sin someterse a la evaluación del impacto ambiental.
El presidente surcoreano, Moon Jae In, declaró en reiteradas ocasiones que la investigación no está dirigida a anular el acuerdo de despliegue, sino a realizar la instalación conforme a los procedimientos apropiados.
Ambas partes desplegaron el THAAD en la región de Seongju, sureste del país, tras las maniobras militares de la República Popular Democrática de Corea, cuyo gobierno considera una amenaza y una provocación permanente los ejercicios bélicos conjuntos cerca y el emplazamiento del sistema antimisiles con fines ofensivos.
De ahí que Pyongyang ordene pruebas frecuentes en su programa de armamento nuclear, con el objetivo de verificar las estrategias de defensa nacional ante posibles ataques.
El acuerdo del despliegue fue adoptado el año pasado por la entonces presidenta Park Geun-hye, destituida recientemente por un escándalo de tráfico de corrupción.
Durante su campaña presidencial, Moon pidió una revisión parlamentaria del sistema, cuyo montaje causó inconformidades y críticas en la península coreana y en la región, incluyendo a China y Rusia.
(PL)
