Los Angeles, 1 jul (dpa) - La leyenda del cine Olivia de Havilland presentó este viernes una demanda en los tribunales de Los Angeles por la serie de TV 'Feud', justo un día antes de cumplir 101 años.

La actriz, conocida sobre todo por su papel de la dulce Melanie Hamilton en 'Lo que el viento se llevó' ('Gone With The Wind', 1939) y ganadora de dos Oscar, acusa al canal estadounidense FX y el director Ryan Murphy de usar su persona sin su autorización y además de falsear su imagen.

La serie de televisión 'Feud' gira en torno a la rivalidad que durante años mantuvieron las divas de Hollywood Joan Crawford (Jessica Lange) y Bette Davis, a la que da vida Susan Sarandon. De Havilland es interpretada por Catherine Zeta-Jones. Rodada como un falso documental, la serie de ocho capítulos se mostró en Estados Unidos en marzo y abril.

En la demanda, que fue publicada entre otros por 'Variety', se señala que De Havillvand siempre abogó por la integridad y la dignidad. Rechazó los chismes y las mentiras. En la serie, se afirma, se pone en su boca una entrevista inventada y palabras que nunca dijo, lo que daña su buen nombre.

La estrella de cine lamenta asimismo que Zeta-Jones, en su papel de Havilland, hable despectivamente de su hermana y también actriz, Joan Fontaine. De Havilland sostiene en la demanda que jamás hizo nada malo a su hermana pequeña, fallecida en 2013 a los 96 años.

Las leyendas de la gran pantalla Crawford y Davis, en torno a las que gira la serie, protagonizaron juntas la película '¿Qué fue de Baby Jane?' ('What Ever Happened to Baby Jane?'). La guerra entre ambas fue tan antológica que ya forma parte de la historia del cine. Crawford murió en 1977, Davis en 1989.

De Havilland, que vive desde hace tiempo en París, era muy amiga de Davis. Rodaron juntas cuatro películas, entre ellas 'Canción de cuna para un cadáver' ('Hush...Hush, Sweet Charlotte Dauerfehde', 1964).

La actriz británica ya fue noticia en los 40 por la lucha que emprendió contra el poder de los grandes estudios en los tribunales. Ganó a la Warner Bros, que quería seguir teniéndola durante años bajo contrato.