Madrid, 1 Abr (Notimex).- Emocionado y sin presiones, el francés Zinedine Zidane encabezó el último entrenamiento del Real Madrid antes del partido sabatino contra Barcelona, el cual será el primer clásico español que vivirá en calidad de director técnico.

El choque entre dos de los clubes más poderosos a nivel internacional se efectuará con motivo de la jornada 31 en la Liga de España, en el Camp Nou, donde los catalanes partirán como claros favoritos, en busca de dar un paso más hacia la conquista de la corona.

Sin embargo, aunque las estadísticas y antecedentes más frescos le den la espalda a los "merengues", no es suficiente para quitarle el sueño a "Zizou", quien espera estrenarse en los clásicos como timonel con el pie derecho, olvidando aquellos datos que le auguran lo contrario.

"Un clásico para un jugador siempre es lo más bonito del futbol. Ahora lo voy a vivir como entrenador, es el primero y estoy muy contento. Es un partido distinto, pero no vamos a cambiar nada sobre lo que tenemos que hacer. Vamos a salir fuertes y poner nuestra idea de juego", indicó en rueda de prensa.

Además del abismo de 10 puntos que separa a estos clubes en la clasificación, el estratega galo consideró que sus pupilos deben cerrar el capítulo del 0-4 que los "culés" les endosaron en la primera vuelta de la temporada.

"No he hablado con los jugadores del partido de la ida. Ellos saben lo que pasó. Es otro partido diferente a la ida. Es un partido que tenemos y queremos ganar. Lo sé porque fui jugador de este equipo. Hay que disfrutar de eso, jugar contra buenos jugadores y medirse contra el Barcelona", expresó.

Con la pausa internacional, Zidane expuso que tuvo tiempo de sobra para preparar este cotejo y al final, le queda un buen balance, aun cuando varios de sus jugadores acudieron a compromisos con sus respectivas selecciones.

"Lo hemos preparado bien toda la semana, aunque faltaran jugadores por estar con sus selecciones. Hay tres puntos en juego y vamos a hacer todo lo posible para ganar allí. Cada uno puede pensar lo que quiera, pero creo que no va a ser fácil ganar al Real Madrid", enfatizó.

Asimismo, ofreció la convocatoria con la cual afrontará este desafío, en la cual destacan los descartes del croata Mateo Kovacic y de Álvaro Arbeloa, en tanto que el timonel tuvo que prescindir de su compatriota Raphael Varane por lesión.

"Ha jugado el segundo partido con Francia, tenía alguna molestia. No sabe exactamente lo que tiene. Hicimos una ecografía esta mañana y haremos una resonancia para ver qué tiene de verdad", refirió.

Aunque no reveló cómo acomodará a su equipo ante la ausencia de Varane, sí resaltó que "tenemos que hacer como lo estamos haciendo últimamente. Estamos en un buen momento y lo tenemos que aprovechar. Somos un equipo con mucha personalidad y llegamos bien en todos los sentidos".