Con el propósito confeso de las autoridades de atender en un futuro cercano a 4,2 millones de visitantes, el turismo cubano puede apuntar, actualmente, tan alto como le sea posible, incluso liderar al Caribe.

Ese dato lo aportaron recientemente autoridades del Ministerio de Turismo (Mintur) de la mayor isla de Las Antillas, convencidos de un cierre de 2016 por encima de los 3,5 millones de viajeros.

Sin embargo, ese elemento bien puede ser solamente la punta del iceberg cuando la diversificación de las modalidades recreativas otorgue a este destino un toque de distinción muy particular.

En el Caribe, Cuba solo es superada por República Dominicana y Puerto Rico, pero en un momento en que los vacacionistas de todo el mundo tienen puestos los ojos en este archipiélago, tal posición puede mejorarse con cierta facilidad.

Un elemento que muchos apuntan es el restablecimiento de relaciones diplomáticas entre Washington y La Habana, luego de más de 50 años de discordias y restricciones, que en definitiva continúan, como es el caso de la liberación de viajes en ambos sentidos.

Pero de cualquier manera, los nuevos tratos otorgan un cierto empujoncito a quienes quieren conocer a Cuba, y escudriñar sus verdades, la cultura, tradiciones y hasta en sus problemas.

Sin embargo, un detalle significativo lo aporta la formación profesional de quienes laboran en el sistema turístico del país, a lo que arrojó luz recientemente la realización en la capital cubana de un evento panamericano de dicho segmento.

De ahí, que la realización en La Habana del XXVI Congreso Panamericano de Escuelas de Hotelería, Gastronomía y Turismo (Conpeht) reforzó la imagen del sector, tal y como lo certificó el presidente de esa entidad, el mexicano Ramón Martínez.

Expresó el catedrático para esa oportunidad (24 al 28 de octubre, Palacio de las Convenciones) que Cuba es ahora imprescindible para el mundo, por su sostenibilidad y preocupación por el desarrollo.

Para el momento, llegaron a Cuba unos 500 expertos de 20 países, interesados en desentrañar la madeja de formación turística del país y su certero apoyo a la industria de los viajes.

El Conpeht se fundó en México en 1991 y agrupa a 26 países, incluida esta isla. En un inicio estaban asociadas 15 entidades educativas y en la actualidad ya suman 110, con fuerte impacto en el desarrollo profesional de los empleados turísticos del área.

Por su parte, la directora de Formatur, Escuela Ramal de Turismo de este país, Miriam Julieta Rendón, reseñó que su sistema abarca 16 escuelas en toda Cuba para la preparación de especialistas y directivos (por año educan a más de ocho mil personas).

Esa estructura apoya, sin dudas, las aspiraciones de una espiral cada vez más creciente del turismo, y la posibilidad de transformar al archipiélago en uno de los destinos más cotizados no solo del Caribe, sino del mundo, lo que en buena medida ya ocurre.

(Tomado de PL, 4 nov-2016)