Washington, 16 ago (RHC) México, Canadá y Estados Unidos abrirán este martes aquí la primera ronda de renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), un proceso en el que cada parte pondrá sus prioridades sobre la mesa.

Esta etapa inicial de las discusiones, que se prolongará hasta el domingo próximo, sigue a la reiterada intención del presidente norteamericano, Donald Trump, de reestructurar el pacto vigente desde 1994, al cual ha calificado como el 'peor acuerdo comercial de la historia' para su país, reporta Prensa Latina.

Antes de llegar a la cita de este miércoles, las naciones que integran el mecanismo dieron a conocer cuáles serán sus principales objetivos.

El representante de Comercio Exterior de Trump, Robert Lighthizer, difundió hace un mes que buscarán reducir el déficit comercial mediante un mayor acceso de los bienes estadounidenses a los mercados de los otros dos territorios incluidos en el convenio.

Según el funcionario, su nación tratará de quitar barreras a las exportaciones a través de la eliminación de subsidios injustos, prácticas que distorsionan el mercado por parte de empresas estatales y onerosas restricciones de propiedad intelectual.

Lighthizer repitió algunas de las críticas realizadas por Trump desde su etapa como candidato republicano, al sostener que 'demasiados estadounidenses se han visto afectados por el cierre de fábricas, los puestos de trabajo que se fueron al exterior y el incumplimiento de promesas políticas'.

La ministra canadiense de Relaciones Exteriores, Chrystia Freeland, expuso que las metas de su país durante las conversaciones incluyen la reducción de la burocracia para las empresas y permitir el libre movimiento de personas entre los tres países.

Insistirá también en la necesidad de proteger su sistema de gestión en la oferta de productos lácteos y aves de corral, las garantías sobre los acuerdos de derechos de autor en relación con la industria cultural, en particular las publicaciones y la radiodifusión.

México, en tanto, comunicó a principios de este mes sus cuatro prioridades: facilitar el acceso a los productos agropecuarios, avanzar hacia un comercio inclusivo y responsable, aprovechar las oportunidades de integración del sector energético y modernizar los mecanismos de controversia.

De acuerdo con el titular de Economía del país latinoamericano, no aceptarán una regresión hacia el comercio administrado o hacia aranceles que limiten o contengan el libre intercambio.

Pero fuentes de esa nación consideran que por su dependencia de Estados Unidos, no tendrá capacidad para imponer muchos términos en el rediseño del Tlcan, en el que Washington tratará de hacer prevalecer sus intereses.