Washington, 3 jun (PL) La idea de que amenazamos la seguridad nacional de Estados Unidos es insultante e inaceptable, manifestó el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, en una entrevista difundida hoy sobre las recientes tarifas impuestas a su país.

En diálogo con el periodista Chuck Todd, presentador del programa Meet de Press de la cadena estadounidense NBC News, el jefe de Gobierno criticó la decisión del presidente Donald Trump de poner en vigor aranceles a las importaciones de acero y aluminio provenientes del vecino del norte.

Una de las cosas que debo admitir que me cuesta mucho entender es la idea de que todo esto se debe a que el presidente y la administración han decidido que Canadá, y el acero y el aluminio canadienses, son una amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos, lamentó Trudeau.

'Nuestros soldados que lucharon y murieron juntos en las playas de la Segunda Guerra Mundial, en las montañas de Afganistán y han estado hombro con hombro en algunos de los lugares más difíciles del mundo, que siempre están ahí el uno para el otro, de alguna manera, es un insulto a eso', agregó.

Asimismo, el primer ministro rechazó la idea de que el acero canadiense presente en los vehículos militares en Estados Unidos, o el aluminio que se emplea en sus aviones de combate, de alguna manera ahora constituya una amenaza.

Trump, como parte de su cruzada contra lo que él califica de leyes comerciales injustas para su país, había anunciado esos aranceles en marzo, pero otorgó exenciones temporales a varios aliados.

Canadá, México y la Unión Europea se encontraban entre los socios a los que se concedió alivio momentáneo, pero la administración del republicano anunció esta semana que desde el viernes pasado también estarían sujetos a los nuevos gravámenes, del 25 por ciento en el caso del acero; y de 10 por ciento en el del aluminio.

Para justificar la acción, Trump citó la Ley de la Sección 232, una normativa raramente invocada que permite aplicar medidas de ese tipo a un país en interés de la seguridad nacional.

En la entrevista divulgada este domingo Trudeau confirmó que su nación establecerá tarifas recíprocas directas como represalia.

Colocaremos los mismos tipos de aranceles al acero y aluminio provenientes de Estados Unidos para ser directamente recíprocos, pero también aplicaremos una serie de gravámenes sobre bienes de consumo, productos terminados para los cuales los canadienses tienen alternativas fáciles, apuntó.

Una de las verdades sobre los aranceles es que aumentan los costos para los consumidores y, además de eso, perjudicarán a los trabajadores estadounidenses y canadienses, consideró el primer ministro.

Al mismo tiempo, llamó la atención sobre el hecho de que Trump dice estar preocupado por los déficits comerciales de Washington con todo el mundo, pero recordó que, en el caso de Canadá, Estados Unidos tiene un superávit de dos mil millones de dólares en el comercio de acero.