La Habana, 17 feb (RHC) La disputa comercial entre China y Estados Unidos junto a la inseguridad de los mercados financieros, conduce a las naciones a buscar refugio en el oro, precisa un informe del Consejo Mundial del Oro, WGC.
Recientemente el WGC afirmó, que la cantidad del metal precioso adquirida por los bancos centrales durante el 2018 representó el segundo total anual más alto registrado.
Los bancos centrales agregaron 651,5 toneladas a las reservas oficiales de oro en 2018, refirió la fuente, un 74% más en comparación con el año anterior.
Mientras la inversión minorista en lingotes y monedas de oro registró un crecimiento anual del 4%, la demanda de monedas aumentó hasta alcanzar un máximo de 236,4 toneladas en los últimos 5 años, el segundo más alto en la historia.
La demanda de lingotes de oro, por su parte, se mantuvo estable en 781,6 toneladas, el quinto año consecutivo de tenencia en un rango firme entre las 780 y las 800 toneladas.
Al cierre del tercer trimestre de 2018, la WGC había advertido ya acerca del incremento de las reservas de oro de los bancos centrales que, en comparación con el mismo periodo del año anterior, subieron un 22 por ciento interanual, hasta situarse en 148,4 toneladas, el nivel más alto de compras netas desde 2015.
Durante ese mismo lapso, la demanda global de lingotes y monedas de oro llegó a 298,1 toneladas, un ascenso del 28% con respecto a un año antes.
Una agravada incertidumbre geopolítica y económica a lo largo del año impulsó a los bancos centrales a diversificar sus reservas y reorientar la atención hacia el objetivo principal de invertir en activos seguros y líquidos, añadió también el estudio.
Además, 'la desaceleración económica y el conflicto comercial entre Estados Unidos y China han apoyado sin duda los flujos de inversión', explicó Alistair Hewitt, director de análisis de mercado del WGC.
Rusia, reconocido ya como el quinto mayor poseedor de oro del planeta, compró más del 42% de todo el metal vendido durante 2018, según se desprende del reporte de la entidad.
Al adquirir 274,3 toneladas de oro el año pasado, la nación euroasiática desplazó a China en el quinto escaño en relación a la tenencia de ese activo.
Si bien se trata del caso más significativo, Rusia no es el único país que busca refugiarse en el metal dorado.
Muchos bancos centrales de mercados emergentes han sido expuestos a la dependencia del dólar; necesitan manejar este riesgo comprando oro, explicó Hewitt.
De acuerdo con los datos del WGC, Turquía fue el segundo mayor comprador de oro y incrementó así, durante el pasado año, sus reservas de este metal precioso en 51,5 toneladas.
En Asia, China y Filipinas también buscan protección en la tenencia de activos auríferos.
Según refieren medios especializados, el Banco Popular de China incrementó las reservas de oro hasta mil 853 toneladas y Filipinas lo hizo en un rango de un 20% desde 2010 hasta mediados de 2018 con más de 196 toneladas de oro.
Como refiere el estudio de WGC, la demanda de oro en 2018 alcanzó cuatro mil 345 toneladas, por encima de las casi cuatro mil 200 toneladas en 2017.
Además de marcar un incremento del 4% en términos interanuales, el dato estuvo en línea con el promedio de la demanda de los últimos cuatro años que se ubica en cuatro mil 347 toneladas.(PL)