Madrid, 8 ago (RHC) La agrupación de centroizquierda Podemos instó al Partido Socialista Obrero Español (PSOE) a definir si facilita la reelección de Mariano Rajoy o permite la conformación de un gobierno alternativo a la derecha en este país.

 Entrevistada por Radio Nacional de España, la dirigente de Podemos Carolina Bescansa emplazó al PSOE a salir de su "triple no": el rechazo a la continuidad de Rajoy en el poder, a un ejecutivo de izquierda y a la celebración de unas terceras elecciones, precisa Prensa Latina.

 Bescansa aludió a la negativa de los socialistas a apoyar una eventual investidura del líder del conservador Partido Popular (PP) y al mismo tiempo rechazar la constitución de un gobierno progresista, lo cual conduciría inexorablemente a unos nuevos comicios.

 A su juicio, la centenaria organización socialdemócrata, en su condición de segunda fuerza con 85 escaños en el Congreso de los Diputados, tiene la responsabilidad de desbloquear la situación política y sacar a España de la "farsa" en la que está instalada.

 Es urgente que el PSOE decida cuál de esos "no" va a incumplir, porque no son compatibles entre sí, insistió la secretaria de Análisis Político y Social de la llamada formación morada en declaraciones a la citada radioemisora pública.

 Remarcó que resulta imprescindible que los socialistas tomen la iniciativa, pues ellos tienen la llave de decidir si gobierna Rajoy o configuran una administración alternativa con Unidos Podemos, tercera fuerza parlamentaria con 71 bancas en la Cámara baja.

 Afirmó que esa coalición entre el partido Izquierda Unida y la agrupación morada está "a la espera" de lo que decidan los socialdemócratas.

 Bescansa manifestó el deseo de esa alianza de sentarse a negociar, pero aclaró que corresponde a la organización liderada por Pedro Sánchez tomar la iniciativa.

 Según su criterio, la suma de ambas formaciones junto a la de los nacionalistas vascos y catalanes es suficiente para despojar a Rajoy del gubernamental Palacio de la Moncloa, "otra cosa es que a algunos no les interese", enfatizó.

 Lamentó que ahora se pretenda estigmatizar a los partidos de ambas regiones, cuando tanto el PP como el PSOE contaron con sus apoyos en otras legislaturas, recordó.

 Pese a ser el más votado en dos procesos electorales, celebrados con apenas seis meses de diferencia, el PP no logró los escaños necesarios para gobernar en solitario.

 En los comicios del pasado 26 de junio, una repetición de los realizados el 20 de diciembre de 2015 ante su inconcluso desenlace, el líder conservador obtuvo 137 de las 350 bancas en el Congreso, lejos de las 176 que marcan la mayoría absoluta.

 Detrás del PP se ubicaron el PSOE, con 85 asientos, la coalición de izquierda Unidos Podemos (71) y el centroderechista Ciudadanos (32).

 Para asegurarse otros cuatro años en el poder, el mandatario saliente requeriría al menos la abstención de los socialistas, descartada por el momento, una vez que Ciudadanos se comprometió a concederle esa opción para facilitar la constitución de un gabinete.