Brasilia, 5 dic (RHC) El presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Evo Morales Ayma, realizará este martes su quinta visita a Brasil, un país históricamente considerado como principal socio comercial al constituir el primer destino de sus exportaciones de gas.

Morales será recibido por su igual brasileño, Michel Temer, en el Palacio de Planalto; después comenzará un encuentro bilateral ampliado y pasado el medio día encabezará la ceremonia de firma de acuerdos, tras la cual será homenajeado con un almuerzo.

El primer mandatario boliviano visitó por primera vez Brasilia en enero de 2006, entonces en su condición de presidente electo; en febrero del año siguiente viajó en visita de Estado, y luego volvió a hacerlo en 2015, en ocasión de la toma de posesión de la presidenta Dilma Roussef, y en febrero de 2016.

Este año dos de los integrantes de su gabinete viajaron acá: en mayo lo hizo el ministro de Gobierno Carlos Romero Bonifaz y en octubre el titular de Relaciones Exteriores, Fernando Huanacuni.

Inicialmente previsto para el 30 de octubre, el viaje de Morales Ayma debió ser aplazado entonces por razones de salud de Temer, quien fue sometido repentinamente a una cirugía para proceder a la desobstrucción del canal uretral.

Con posterioridad se fijó una nueva fecha, el 27 de noviembre, pero una vez más el ocupante del Palacio de Planalto tuvo que ser internado, en esta ocasión para someterse a una angioplastia de tres arterias coronarias con implante de dos stents.

Al anunciar hace una semana la nueva fecha de la visita del jefe de Estado, el Ministerio de Relaciones Exteriores recordó que Brasil y Bolivia comparten una extensa frontera común (tres mil 423 kilómetros) y la condición de país amazónico y de la cuenca del Plata, por lo cual mantienen una agenda bilateral amplia y diversificada.

El viaje de Evo Morales - adelantó - tiene por objetivo fortalecer la cooperación y la coordinación bilateral en temas como la lucha contra el crimen transnacional, energía, defensa, desarrollo fronterizo, integración de la infraestructura física, asuntos migratorios y consulares, comercio e inversiones.

La cooperación energética es de gran importancia para ambos países al constituir un insumo para la política brasileña en esta área y una fuente de ingresos para Bolivia, señala el portal de Itamaraty, según el cual los principales ejes de la integración económica son precisamente la energía y los proyectos de infraestructura regional.

Bolivia, agrega, es el único país de América del Sur que tiene constantemente desde 2003 excedentes comerciales con Brasil, en razón de las exportaciones masivas de gas (el 98 por ciento de sus ventas totales al exterior).

Subraya además que las dos naciones han desarrollado una importante política de integración fronteriza, con el fin de convertir los límites entre ambos países en un espacio de paz, cooperación y desarrollo económico y social, y realza el aumento de la cooperación en la lucha contra los delitos transnacionales, sobre todo el tráfico de drogas.