La Paz, 20 jul (RHC) El presidente de Bolivia, Evo Morales, recordó el restablecimiento formal de las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos después de medio siglo sin vínculos.

Morales destacó que el 20 de julio de 2015, Washington y La Habana restablecieron sus relaciones con la esperanza de eliminar el bloqueo a la nación caribeña, condenada por la comunidad internacional.

El primer mandatario refutó que actualmente el gobierno de Donald Trump, con su política de racismo y muros, se niega a continuar ese proceso.

El 17 de diciembre de 2014, los entonces presidentes de Cuba, Raúl Castro y de Estados Unidos, Barack Obama, anunciaron de forma simultánea el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre las dos naciones y que avanzarían hacia la normalización de los vínculos bilaterales.

Sin embargo, en 2017 las relaciones entre los dos países experimentaron un retroceso tras la llegada a la Casa Blanca del Trump.

El tres de febrero de ese año, el gobernante republicano ordenó una revisión completa de la política hacia el país caribeño, que incluyó la reducción del personal diplomático estadounidense en La Habana, la expulsión de funcionarios de la embajada de Cuba en Uashinton, las advertencias a los viajeros para disuadirlos de visitar nuestro país y la prohibición de los viajes de delegaciones oficiales norteamericanas.

Asimismo, anunció la evaluación de un eventual cierre de la representación diplomática en Cuba, en respuesta a incidentes de salud reportados por sus funcionarios acerca de los cuales hasta ahora no hay resultados concluyentes.

El presidente Evo Morales ratificó que las luchas de los movimientos sociales hicieron viable el proceso de cambio en Bolivia, con proyectos y programas ejecutados en beneficio del ser humano.

Durante el acto inaugural de la unidad educativa Mariscal Andrés de Santa Cruz en la localidad de Arapata del departamento de La Paz, Morales aseveró que la historia del proceso de cambio no es posible concebirse sin los movimientos cocaleros, yungueños o del trópico de Cochabamba.

Aseguró que, con el pacto de unidad, formado por las organizaciones sociales de los diferentes sectores del país, se recuperó primero la patria y se construye ahora una nueva Bolivia, gracias a la conciencia del pueblo.

Argumentó que, para cambiar la nación, no solo fue necesario una liberación de carácter ideológico, político, cultural o social, sino también de carácter económico.

En este sentido, precisó la importancia de recuperar los recursos naturales, renovables o no, metálicos o no; las empresas estratégicas; y los servicios básicos, que jamás deben ser un negocio privado, como el agua, la luz o los sistemas de comunicación.

Morales expresó que aquellas demandas exigidas por movimientos sociales hoy son programas, políticas y proyectos del gobierno nacional, de gran importancia a nivel foráneo.

“Los organismos internacionales nos piden que repliquemos programas como Mi agua, Mi riego en países de América Latina, por el beneficio que tienen para el ser humano”, agregó el mandatario.

Asimismo, refirió que en estos tiempos la necesidad y la injusticia dejaron de educar al pueblo, porque ahora se construyen escuelas y se crean programas a favor de las nuevas generaciones, por lo cual recalcó la importancia de estudiar la historia de la nación.