Washington, 23 jul (RHC) El presidente estadounidense, Donald Trump, lanzó fuertes advertencias al primer mandatario iraní, Hassan Rouhani, en medio de las tensiones que viven hoy ambos países tras la decisión norteamericana de abandonar el pacto nuclear con Teherán.

'Al presidente iraní Rouhani: nunca jamás amenace a Estados Unidos o sufrirá consecuencias que muy pocos han sufrido antes en toda la historia', escribió el jefe de la Casa Blanca en su cuenta de la red social Twitter cerca de la medianoche del domingo, refiere Prensa Latina.

Como parte de su mensaje, publicado casi completamente en mayúsculas, Trump añadió que Estados Unidos no soportará más 'sus demenciales palabras de violencia y muerte' y llamó a su homólogo a ser cauteloso.

Ese acalorado pronunciamiento del gobernante republicano ocurrió después de que Rouhani llamó este domingo a Washington a frenar las provocaciones contra la nación persa, en referencia a las políticas cada vez más hostiles del gobierno norteamericano.

'Los estadounidenses deben comprender muy bien que la paz con Irán es la madre de todas las paces y la guerra con Irán es la madre de todas las guerras', expresó el presidente iraní durante una reunión celebrada en Teherán con los jefes de las misiones diplomáticas de su país.

El pueblo iraní derrotará cualquier amenaza proveniente de la Casa Blanca, agregó Rouhani, quien en referencia a las sanciones promovdas por Washington dijo que tendrán algunos costos, pero al final los beneficios serán mayores para su población.

Las tensiones entre ambos países se incrementaron desde que el pasado 8 de mayo Trump decidió retirarse unilateralmente del acuerdo nuclear suscrito en 2015 por la nación persa y el Grupo 5+1 (Estados Unidos, Francia, Reino Unido, China y Rusia más Alemania).

Esa postura del jefe de la Casa Blanca en relación con el Plan Integral de Acción Conjunta se dio a pesar de que el resto de las naciones involucradas en el mecanismo lo defendieron y consideran que Irán ha cumplido con lo establecido en él.

La salida norteamericana implica tanto la reimposición de sanciones -algunas de las cuales entrarán en vigor el 6 de agosto y otras el 4 de noviembre-, como la aplicación de castigos secundarios contra terceros países.

En ese sentido, la nación norteña está presionando a sus aliados para que finalicen todas las importaciones de petróleo iraní antes de esa última fecha, lo cual podría afectar a países de vínculos estrechos con Estados Unidos en Europa y Asia.

Además, a principios de este mes un funcionario del Departamento de Estado manifestó que Trump 'no dudará' en castigar a las compañías extranjeras que no cumplan con las sanciones a imponerse en los próximos meses.

Medios locales señalaron que tal posición podría intensificar aún más los conflictos con aliados tradicionales en Europa que han expresado su deseo de continuar haciendo negocios con Teherán.

(Prensa Ltina)