Beijing, 1 ene (RHC) El presidente Xi Jinping aseguró que la cooperación es la herramienta clave para las relaciones China-Estados Unidos, que cumplen 40 años en fase de reconstrucción tras sobrevivir un 2018 convulso por las discordias en distintos terrenos.
Al intercambiar saludos con su par estadounidense, Donald Trump, por la efemérides, el primer mandatario indicó que la historia demostró el valor de ese principio para superar los avances y retrocesos experimentados durante cuatro décadas de nexos bilaterales, resalta Prensa Latina.
Xi rememoró los grandes beneficios de la cooperación para ambos pueblos y la paz, estabilidad y prosperidad global.
Xi reiteró la importancia que le concede a los vínculos con Estados Unidos y llamó a Trump a tomar experiencias anteriores e implementar los consensos alcanzados hace un mes en Argentina, cuando los dos pactaron una tregua e instruyeron buscar un fin a los conflictos entre sus países. También abogó por promover en conjunto las relaciones sobre la base de la coordinación y la estabilidad, de manera tal que arrojen más beneficios en el plano bilateral e internacional.
Mientras, Trump indicó que desarrollar los nexos Beijing-Washington de forma constructiva son prioridades personales y confió en obtener más logros en un futuro cercano, indicó una nota de la Secretaría de Estado.
El 1 de enero de 1979 las dos potencias formalizaron sus relaciones con la apertura de embajadas en las respectivas capitales.
Además, entró en vigor un texto conjunto que contempla la ruptura de los lazos con la isla de Taiwán, la retirada de tropas estadounidenses de allí y el fin de un tratado mutuo de defensa.
Pero desde la llegada a la presidencia de Trump, los lazos sufrieron constantes retrocesos que tuvieron su clímax el año pasado cuando la Casa Blanca desató un enfrentamiento que mantuvo al planeta en vilo.
La comunidad internacional vio y escuchó de todo: denuncias sobre robo de tecnología y propiedad intelectual que derivaron en una peligrosa guerra económica y continuas disposiciones para aproximarse a Taiwán, así como incursiones bélicas en aguas jurisdiccionales de China.
También Washington sancionó a instituciones militares del gigante asiático por la cooperación con Rusia y lanzó acusaciones sobre la supuesta injerencia de Beijing en los comicios norteamericanos de medio término celebrados en noviembre, cuando perdieron los republicanos de Trump.
China rebatió de forma contundente, inmediata y oportuna todos y cada uno de los pretextos usados por Estados Unidos en su arremetida, sin dejar de apostar por el diálogo para solucionar cualquier diferencia.
(Prensa Latina)
