Brasilia, 25 feb (RHC)  El colapso de una represa en el municipio Brumadinho, estado de Minas Gerais en el noreste de Brasil totalizó 179 víctimas mortales, al cumplirse un mes de ocurrir el accidente.

El 25 de enero se quebraron los diques de un depósito de residuos minerales, de la empresa Vale, en ese distrito y un vertido de más de 12 millones de metros cúbicos de lodo y barro arrasó con todo lo que encontró a su paso.

Un reporte actualizado de las autoridades regionales indica que, junto al número de muertes, confirmadas por el Instituto de Medicina Legal, se registran 131 personas desaparecidas. La mayoría de las víctimas eran trabajadores de Vale, subcontratados y residentes de la zona.

Varias protestas en todos los estados brasileños se suscitaron en estos días para exigir respuestas por parte del gobierno para castigar a la multinacional y compensar a los familiares de los desaparecidos.

Cientos de personas protestaron en Brumadinho y Belo Horizonte este domingo frente al museo de la minería, en la Plaza de la Libertad, y gritaron: 'Somos todos alcanzados'. Otras decenas de actos fueron convocados este lunes por todo el país.

La Agencia Brasil indica que las dificultades causadas por el lodo, junto a la lluvia intensa, aumentaron aún más la tensión en la búsqueda de víctimas.

Por estimación del Cuerpo de Bomberos de Minas Gerais, los trabajos de búsqueda y socorro deberán extenderse por tres a cuatro meses.

Los desechos alcanzaron el río Paraopeba y el Gobierno del estado prohibió el consumo de agua por riesgo de contaminación.

Por la desventura, el Ministerio de Minas y Energía definió una serie de medidas de precaución de accidentes en las cerca de mil represas existentes en el país.

La disposición prevé la extinción de los embalses llamados aguas arriba, exactamente como el que se rompió en Brumadinho, hasta el 15 de agosto de 2021.

Recientemente Vale informó al Ministerio Público del Trabajo que mantendrá el pago de dos tercios de los salarios de todos su empleados y subcontratados que murieron en la tragedia.

Según directivos de la empresa, que aún aseguran desconocer las causas del quiebre de la represa, el pago se mantendrá por un año o hasta que se cierre un acuerdo definitivo de indemnización.