Washington, 10 jun (RHC) El presidente estadounidense, Donald Trump, confirmó que está programado un encuentro con su homólogo chino, Xi Jinping, en el contexto de la cumbre del G-20 a fines de este mes en Japón.
En declaraciones a la prensa local, Trump manifestó que impondrá nuevos aranceles a China si el mandatario de ese país no acude a la cita prevista.
La víspera, el secretario norteamericano del Tesoro, Steven Mnuchin, aseguró que el jefe de la Casa Blanca decidirá acerca de nuevas tarifas, tras el encuentro en la ciudad nipona de Osaka los próximos 28 y 29 de junio.
De acuerdo con Trump, el gobierno norteamericano quiere asegurarse de que ambas naciones van por el camino adecuado con el fin de alcanzar un acuerdo comercial.
Mientras el presidente de Estados Unidos, Donald Trump; y la Cámara de Comercio del país, mostraron en televisión sus desacuerdos sobre las tarifas impuestas o empleadas por el mandatario para amenazar a socios económicos.
Myron Brilliant, jefe de asuntos internacionales del grupo de cabildeo, declaró este lunes a la cadena CNBC que el gobernante tiene razón en querer que China cambie su comercio proteccionista y sus prácticas de negocios, pero estimó que los aranceles no son la vía para hacerlo.
Asimismo, expresó que el jefe de la Casa Blanca nunca debió usar la amenaza de gravámenes para tratar de forzar a México a tomar acciones contra la inmigración ilegal, especialmente cuando el Acuerdo México-Estados Unidos-Canadá, está pendiente de aprobación en el Congreso.
La utilización de los aranceles (con el aumento de amenazas a nuestra economía, agricultores, fabricantes y consumidores) va a perjudicar al país y también crea incertidumbre con nuestros socios, expresó el representante de la Cámara de Comercio.
Brilliant agregó que lo sucedido con México podría enviar el mensaje equivocado a China de que Estados Unidos, incluso si logra un acuerdo comercial como el de América del Norte, puede regresar más tarde y aplicarle tarifas de cualquier modo.
Poco después de la entrevista de la televisora con el miembro del grupo de cabildeo, Trump llamó a CNBC para defender lo que él considera la efectividad de los aranceles y criticar a la Cámara de Comercio.
Según el gobernante republicano, el grupo empresarial protege a las compañías y no a los norteamericanos, y añadió que los gravámenes le permiten a Estados Unidos nivelar el campo de juego, al alegar que China llegará a un acuerdo 'porque van a tener que hacerlo' debido a las presiones arancelarias.
Pero la propia televisora advirtió que no está claro hasta qué punto China está siendo perjudicada por los aranceles, cuando datos publicados por Beijing este lunes muestran un aumento del superávit de la nación oriental con Estados Unidos el mes pasado, al pasar de 21 mil millones en abril a casi 27 mil millones de dólares en mayo.
Disminuir el desequilibrio comercial entre los dos países ha sido uno de los objetivos de Trump en la aplicación de tarifas al gigante asiático, pero las negociaciones de alto nivel que pudieran modificar esa situación se estancaron cuando decidió en mayo elevar aún más los gravámenes a los productos chinos.
Al defender su política arancelaria, el jefe de Estado también afirmó hoy que si no fuera por las tarifas, no habría alcanzado a un acuerdo con México para que el país latinoamericano tome más acciones contra la inmigración ilegal.
En su arremetida contra la Cámara de Comercio, llegó a manifestar que estaba valorando renunciar a la membresía del grupo empresarial a raíz de la disputa.