Damasco, 12 jun (RHC) Las unidades de defensa antiaérea siria respondieron a una agresión israelí con misiles contra el Monte Al-Jaraá, en la provincia de Deraá, a unos cien kilómetros al sur de Damasco, la capital del país.
Fuentes periodísticas reportaron que varios de los cohetes fueron interceptados y derribados, pero poco después los agresores intentaron interceptar electrónicamente el sistema de radares de la defensa antiaérea siria.
Además se conoció que más de 13 000 sirios desplazados lograron salir del campamento de Rub-kán, ubicado junto a la frontera con Jordania, donde tropas estadounidenses y terroristas obstaculizan cualquier arreglo pacificador.
Los Comités de Coordinación entre Siria y Rusia para el retorno de los desplazados denuncian que Washington y sus aliados propician condiciones para mantener a los terroristas y entorpecen los esfuerzos para devolver a los desplazados a sus hogares.
Cerca de 70 mil hectáreas de trigo y cebada fueron incendiadas por grupos extremistas en la provincia de Hasaka, 710 kilómetros al norte de la capital siria.
De acuerdo con el Departamento de Agricultura de esa provincia, las pérdidas de esos dos cultivos llegan a las 18 mil toneladas y perjudican a centenares de campesinos que dependen de esas siembras.
Testimonios recogidos en esos reportes indicaron que los causantes de los incendios son integrantes de las llamadas Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), respaldadas por tropas estadounidenses asentadas ilegalmente en 11 bases en ese territorio.
Asimismo, indicaron que los elementos de las FDS atemorizaron a los agricultores y bomberos y requisaron los equipos destinados a extinguir los incendios.