Caracas, 14 ago (RHC) El ministerio de Exteriores de China, exigió a Estados Unidos a no inmiscuirse en los asuntos internos de Hong Kong, Región Administrativa Especial de ese país, tras verse envuelta en masivas protestas desde hace semanas.
Esto debido a un proyecto de ley que se debatiría, para permitir la extradición de sospechosos desde el territorio autónomo a la China continental para ser juzgados, pero Hong Kong tomó la decisión de retrasarla para luego ser dada 'por muerta'. A pesar de esta decisión, los manifestantes continúan saliendo a la calle exigiendo reformas gubernamentales.
En días pasados, el gigante asiático condenó la reunión que tuviese la diplomática del consulado estadounidense en Hong Kong, Julie Eadeh, indicando que EEUU 'ha desempeñado un papel vergonzoso en los disturbios'.
Ante esto, el Departamento de Estado del país norteamericano argumentó que ese encuentro lo realizan cada día.
Las autoridades chinas condenaron hoy las protestas violentas que han provocado la cancelación de centenares de vuelos en el aeropuerto de Hong Kong, en el sur del país.
La terminal aérea de esa isla del sur de China, una de las más transitadas del mundo, ha sido escenario durante los últimos días de enfrentamientos violentos que forzaron la cancelación de todos los vuelos y la interrupción de varias de sus operaciones habituales.
Este miércoles en la mañana se reanudaron de nuevo los viajes y la policía de Hong Kong confirmó el arresto de cinco personas implicadas en los violentos disturbios.
Los detenidos fueron acusados de delitos de reunión ilegal, posesión de armas ofensivas y agresión a la policía, según señalaron las autoridades en un comunicado.
El aeródromo se ha convertido, desde hace unos días en el principal epicentro de las protestas que comenzaron a principios de junio para reclamar la paralización de un proyecto de reformas a la extradición de la REAHK.
Pese a que el ejecutivo de Hong Kong suspendió hace más de un mes el plan de cambios a esa legislación, las manifestaciones no se han detenido y diversas voces dentro y fuera de esa isla del sur de China han criticado las verdaderas intenciones de esas reivindicaciones.
Mientras, el gobierno de Beijing calificó las agresiones durante las protestas como actos de terrorismo reafirmó su apoyo hacia las autoridades y las fuerzas del orden de la RAEHK por sus esfuerzos para detener la violencia, restablecer el orden y salvaguardar el estado de derecho y la seguridad en la zona.
