Bogotá, 9 dic (RHC) El Consejo Regional Indígena del Cauca, en Colombia, condenó  el asesinato de otro indígena en un país donde esas comunidades son víctimas frecuentes de la violencia.
           
El joven Yimmy Alberto Pacue fue ultimado por hombres armados en el resguardo de Jambaló, departamento del Cauca, cuando se transportaba en una motocicleta junto a su esposa, e hijo de dos meses de nacido.  

El Consejo instó a las autoridades locales a dar con los responsables y a determinar medidas eficaces de protección a la población.
         
Diferentes voces coinciden en que cientos de líderes sociales, indígenas y exguerrilleros han sido asesinados desde la firma del Acuerdo de Paz, mientras aumentan los llamados a su implementación integral.

Cada mes, semana y, prácticamente, cada día de este año, la violencia fue una constante en la realidad colombiana.

Amenazas, atentados, secuestros y asesinatos se repitieron, teniendo entre sus blancos frecuentes a miembros de las comunidades indígenas, líderes sociales y exguerrilleros.

Todo ello sucede a tres años de la firma del Acuerdo de Paz y a 16 meses de la llegada a la Casa de Nariño (sede la Presidencia) de Iván Duque.

Diferentes voces coinciden en que cientos de líderes sociales, indígenas y exguerrilleros han sido asesinados desde la firma del Acuerdo, al tiempo que aumentan los llamados a su implementación integral en aras de concretar una paz con justicia social, estable y duradera.

En el caso de las comunidades indígenas y afrodescendientes, insisten también en la necesidad de una presencia integral del Estado en sus territorios, a la vez que se oponen a que haya grupos armados, sean legales o ilegales, e instan a que sean respetados sus formas propias de defensa.