Washington, 29 may (rt).- El presidente de EE.UU., Donald Trump, anunció el despliegue de la Guardia Nacional en Mineápolis, donde se producen multitudinarias protestas violentas por la muerte del afroamericano George Floyd a manos de la Policía cuando le arrestaron el pasado lunes.
Dijo que miembros de lese cuerpo llegaron a la localidad de Minesota para controlar la situación: "Están en Mineápolis y completamente preparados. George Floyd no habrá muerto en vano. Respeten su memoria", escribió el inquilino de la Casa Blanca en su cuenta de Twitter.
Mineápolis primero fue escenario de protestas pacíficas contra la brutalidad policial, que derivaron en enfrentamientos directos y violentos con la Policía. Pronto se registraron actos de saqueo y vandalismo, unos disturbios que se extendieron a otras ciudades estadounidenses.
Las manifestaciones se intensificaron aún más después de que el fiscal del condado de Hennepin, Mike Freeman, anunció el 28 de mayo que, de momento, no tenía intención de "imputar cargos ni detener" a Derek Chauvin, el agente responsable de la muerte de George Floyd.
Grupos de manifestantes irrumpieron en el tercer cuartel policial de Mineápolis, incendiaron y destruyeron todo a su paso y los huyeron del lugar, mientras que la Policía de St. Paul reportó daños o saqueos en más de 170 negocios.
El 25 de mayo, la Policía de Mineápolis detuvo a George Floyd por presunto "fraude en curso". Durante el arresto, Derek Chauvin le presionó el cuello con su rodilla durante al menos ocho minutos, a pesar de que el sospechoso estaba esposado en el piso y se quejó de que no podía respirar. Poco después, el sospechoso fue declarado muerto en un hospital.
La grabación con la que un testigo registró ese arresto se difundió en las redes sociales y desató una ola de indignación de manera inmediata. Los agentes involucrados fueron despedidos y el FBI se ocupó del asunto para aclarar si se produjo una violación de los derechos civiles.