Bogotá, 18 ene (RHC) El ministro colombiano de Justicia, Yesid Reyes, anunció en Bogotá que esta semana quedarán libres 16 guerrilleros beneficiados con un indulto presidencial, aprobado para 30 integrantes de las insurgentes FARC-EP, Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo.

Durante una entrevista a la prensa local, declaró Reyes que esos reclusos, condenados por delitos políticos, no presentan sanciones NI investigaciones abiertas por otras causas, por lo cual luego de su liberación serán incorporados a un programa de reinserción social.

En tanto, la víspera, autoridades de las FARC-EP solicitaron al Ejecutivo colombiano liberar a los prisioneros que se encuentren en condiciones graves de salud.

A través de un comunicado publicado en La Habana, Iván Márquez, jefe de la comisión negociadora de esa guerrilla en los diálogos de paz, consideró que esa medida contribuiría al fortalecimiento de las pláticas con sede en La Habana, e incrementaría la confianza entre ambas partes para lograr el fin del conflicto armado en Colombia.

Por su parte, el sacerdote Dario Echeverry, secretario de la Comisión de Conciliación Nacional de la Iglesia de Colombia (CCNI), dijo que la búsqueda de los restos del religioso y guerrillero Camilo Torres es clave para la reconciliación del país.

En declaraciones que reproduce este lunes el diario El Tiempo de Bogotá, el padre Echeverry manifestó que su figura se ha reducido simplemente a la del guerrillero y se han olvidado cosas importantes de su personalidad.

Agregó que fue un buen cura, político y académico; estuvo en la fundación de la Facultad de Sociología de la Universidad Nacional y dar a conocer todo esto vale la pena, apuntó el secretario de la CCNI.

Los comentarios del religioso ocurren tras la decisión del presidente de la República, Juan Manuel Santos, de ordenar la búsqueda de los restos mortales del sacerdote-guerrillero al ministerio de Defensa, como un gesto simbólico en la búsqueda del camino de la paz.

La decisión del gobernante se dio luego de que el Ejército de Liberación Nacional (ELN) solicitara a Santos días atrás la búsqueda del cuerpo del revolucionario colombiano, con motivo de los 50 años de su caída en combate, pedido que esa fuerza guerrillera evaluó como un gesto de paz de parte del Ejecutivo.

El Tiempo señala que para solicitar encontrar el cadáver de quien fuera uno de los fundadores del ELN intercedió asimismo el arzobispo de Cali, Darío de Jesús Monsalve.

Por otra parte, el cotidiano capitalino cita palabras del analista León Valencia, antiguo militante del ELN, quien afirmó que esa guerrilla no da crédito a versiones que indican que sus restos le fueron entregados a su hermano, Fernando Torres -ya fallecido- o están sepultados en una urna funeraria de la ciudad de Bucaramanga.

Al referirse a la personalidad de Torres, Valencia manifestó que él llenaba plazas en todo el país, era un símbolo de rebeldía y protesta, por lo que exponer su cadáver era como un emblema, un punto de referencia, lo que los gobernantes de entonces no querían.

El religioso y revolucionario colombiano cayó en 1966 en el norteño departamento de Santander, en un enfrentamiento entre el ELN y la V Brigada del Ejército Nacional, que comandaba entonces el ya fallecido general Álvaro Valencia Tovar.

Al respecto, el reconocido periodista, escritor y columnista Enrique Santos Molano afirmó que su cuerpo continúa en Santander, en la zona donde murió combatiendo.

Lo más probable es que sus despojos se encuentren en el corregimiento de Patio Cemento, municipio de San Vicente de Chucurí (Santander) y que allí es por donde se podría comenzar la búsqueda.