Washington, 2 feb (RHC) El secretario de Defensa de Estados Unidos, Ashton Carter, informó que el gobierno norteamericano elevará a 582 millones de dólares el presupuesto militar en 2017.
Justificó Carter que el alza responde a los esfuerzos para enfrentar la expansión del grupo terrorista autodenomido Estado Islámico y para respaldar a los aliados de la OTAN ante una supuesta amenaza de Rusia, además de financiar la rotación de fuerzas en Europa, entrenamientos y mejoras en las instalaciones de guerra.
También anunció el director del departamento estadounidense de Defensa que su país invertirá en tecnologías futuristas como el cañón de riel para disparar proyectiles a gran velocidad, y enjambres de microdrones.
De acuerdo con el diario The New York Times, la Casa Blanca tiene previsto aumentar el despliegue de armas pesadas, vehículos blindados y otros equipos en los países de la OTAN, en Europa central y oriental, con el objetivo de aislar a Rusia, país que aboga por aliviar las tensiones con Occidente.
Mientras el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se reunió a puerta cerrada con los líderes republicanos del Congreso, Mitch McConnell (Senado) y Paul Ryan (Cámara de Representantes), para intentar buscar consenso legislativo.
Esta es la primera vez que el inquilino de la Casa Blanca se reúne con Ryan, después que este asumiera las riendas de la mayoría en la Cámara baja, desde octubre pasado.
Al término del encuentro, Obama y Ryan compartieron un almuerzo privado.
Según el portavoz de la mansión ejecutiva, Josh Earnest, el mandatario expuso a McConnell y Ryan las prioridades en las que espera poder trabajar conjuntamente con el Congreso en 2016.
Earnest recordó que Ryan y otros legisladores republicanos de la Cámara de Representantes se comprometieron a tomar medidas y "tratar de dar a las autoridades del gobierno en Puerto Rico más herramientas que puedan utilizar para hacer frente a sus desafíos financieros".
Otro de los temas discutidos hoy en la Oficina Oval giraron en torno al Tratado de Libre Comercio Transpacífico (TPP), firmado por Estados Unidos y otros 11 países, que pretende crear la mayor zona de libre comercio del mundo, y en el que el ejecutivo tiene interés que el Congreso vote y apruebe.
McConnell trasladó a Obama algunas de sus preocupaciones sobre el TPP y dejó la puerta abierta a la posibilidad de que el pacto no se someta a voto hasta después de las elecciones de noviembre, aseguró Earnest.
Obama y los líderes republicanos conversaron además sobre la "epidemia" de adicción a la heroína y analgésicos opiáceos, y discutieron sobre acciones adicionales que pueden tomar el Gobierno y el Congreso.
Hoy se anunció que Obama pedirá mil 100 millones de dólares dentro de su propuesta presupuestaria para el nuevo año fiscal, con el fin de mejorar el combate a esas adicciones.
Medios locales de prensa destacaron que los opiáceos, que incluyen medicamentos recetados para el dolor y la heroína, estuvieron involucrados en más de 28 mil muertes en el país en 2014, de acuerdo con una información ofrecida por el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades.
Por su parte, Paul Ryan transmitió a Obama su "preocupación" por la implementación de los cambios al programa de exención de visas para ingresar a Estados Unidos.
